Noche y fuego garantizaron el éxito

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

La feria medieval boirense se consolida a golpe de espectáculos, pese a coincidir con un fin de semana de playa

14 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Tiene una corta trayectoria y pocos elementos que la diferencien de las otras ferias de estilo medieval que se celebran a lo largo y ancho de Galicia, pero en Boiro dan por consolidado su Mercado Castrexo. Contribuyeron a ello los artesanos que mostraron su trabajo al público y el vistoso espectáculo de fuego y acrobacias que tuvo lugar la noche del sábado, coincidiendo con uno de los momentos de mayor afluencia de visitantes.

Y es que, aunque la lluvia no beneficia a este tipo de iniciativas que se celebran al aire libre, jornadas de sol y calor como las tres últimas que se han vivido en Barbanza tampoco ayudan. La calle peatonal en la que tomaron posiciones medio centenar de vendedores de productos de lo más variado registró los picos de afluencia de gente por la mañana y al anochecer, quedando prácticamente desierta en las primeras horas de la tarde.

El momento álgido se produjo el sábado. Hacia las nueve de la noche ya eran muchas las personas que curioseaban entre los puestos. Buena parte de ellas se arremolinaron sobre las diez en torno a los protagonistas del espectáculo estrella de la feria, con fuego y acrobacias.

Hubo quien despidió la jornada en los puestos de comida, que constituyeron otro de los grandes atractivos del Mercado Castrexo. Esta estampa se repitió ayer por la noche, en la despedida de una iniciativa que aspira a continuar y seguir creciendo.