Profesionales del hospital dicen que la reordenación sanitaria resta autonomía

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Se trata de las primeras críticas a la reforma de la Lei de Saúde

05 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Dos días han tardado en surgir, en lo que concierne al área barbanzana, las primeras críticas a la reforma de la ley de salud y el nuevo mapa sanitario que la Xunta plantea con ella. La oposición más directa la encabeza CIG-Saúde, que ha exigido la retirada del anteproyecto que hizo público el miércoles la Administración gallega. La secretaria nacional del sindicato, María Xosé Abuín, considera que la creación de las siete áreas de gestión integrada «condicionan de forma negativa» la atención y ha supuesto una «pérdida de autonomía» para las que han quedado subordinadas a un hospital de referencia, como en el caso del centro de Oleiros.

La oposición a la reordenación sanitaria considera que esta consagra la dependencia que existe en el hospital barbanzano de Santiago, postura que ya se venía denunciando en los últimos tiempos por delegadas de la CIG en el centro comarcal, en cuanto a que los jefes de cada unidad están en Santiago y no ven las necesidades que hay en el centro, al tiempo que las peticiones de material o pequeñas reclamaciones del día a día se han burocratizado en exceso, lo que lastra en muchos casos la libertad de acción y el avance de los profesionales.

Período de alegaciones

CIG-Saúde reclama un decreto que «vincule la gerencia con el área sanitaria», la creación de una propia en Barbanza que favorezca una gestión «próxima» y «el conocimiento de los problemas de salud de la zona». Menos combativa, la presidenta de la comisión de centro de Barbanza asegura que las trabas burocráticas son las mismas para todos, aunque indica que se estudiará el texto en profundidad porque «todavía estamos en período de alegaciones».