Regreso al pasado de los míticos Romero

josé manuel sande OUTES / CORRESPONSAL

BARBANZA

sande

Enrique Martínez Pedrosa formó parte del grupo outiense que estuvo activo durante casi 30 años y recorrió todos los rincones de Galicia

01 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El mundo de la música, hoy repleto de pequeños grupos que tratan de abrirse camino, tuvo a Los Romero de Outes entre sus grandes en el pasado. La formación incorporó como vocalista a Enrique Martínez Pedrosa en 1965, un joven de 16 años nacido en la localidad de Ribademar. El adolescente compaginó sus estudios de bachiller y magisterio con las actuaciones, hasta que el destino docente y obligatorio del cantante a Las Palmas motivó su alejamiento de la música, y también el declive de uno de los conjuntos musicales de más prestigio en la comarca barbanzana.

La formación musical se iniciara a mediados los años cincuenta para desaparecer de los escenarios a comienzos de los ochenta. Durante esos casi 30 años, Los Romero amenizaron verbenas, salas de fiesta, y acontecimientos lúdicos y festivos en toda Galicia, llegando incluso a muchas localidades asturianas. Entre sus logros figura la grabación de un disco con dos temas, Os Mariñeiros, en gallego, y Tutto il mio amore, en italiano, de los que es autor, Domingo Barreiros, también integrante del grupo.

Conseguir una grabación discográfica era un elemento de prestigio y reconocimiento popular y por ello, Los Romero al consolidarse entre las formaciones musicales gallegas, se propusieron como ambición prioritaria disponer de un disco propio. Domingo Barreiros fue el encargado de componer los dos temas que integrarían el disco, y siguiendo las tendencias de la época, uno de los temas se elaboró en gallego, y el otro en un idioma foráneo, el italiano, por afición del autor a la musicología de aquel país.

Fue todo un reto, un trabajo extraordinario y un cúmulo de peripecias las que les llevaron a Barcelona para grabar en los Estudios Barnaphon su primer y único disco. Enrique Martínez, recuerda aquel trance: «Era a Semana Santa do 1973. Despois de actuar nunha sala de festas da Coruña, collemos o tren, o domingo 15 de abril, con destino á Cidade Condal. Ao chegar á estación de Zaragoza soubemos que esa noite morrera en accidente de tráfico Nino Bravo, o gran cantante valenciano. Nós seguimos ruta, pois perante esa semana tiñamos que rematar a gravación e volver a Galicia, xa que o martes seguinte debiámonos incorporar ás clases».

Nexo con la docencia

De la formación musical de Los Romero sobresalen dos circunstancias, por un lado que fueron cuatro hermanos Romero Queiro, Carlos, Eugenio, Gerardo y Luís, nacidos en la localidad outiense de Coiradas, los mentores de esta agrupación; y por otro, que tanto ellos como los músicos y el vocalista que fueron incorporados a la formación tenían vinculación con la docencia pública. Unos eran maestros, uno conserje de colegio y otros conductores de autobuses escolares.

Aunque el grupo sufrió variaciones, pues inicialmente llegaron a ser doce los integrantes, la composición más tradicional fue la de siete miembros. Martínez Pedrosa recuerda que, interviniendo como vocalista de la formación, actuaron en más de un millar de lugares: «Estivemos na maioría das romarías e salas de festas de Galicia e Asturias, e lembro eses trece anos cos Romero coma unha etapa inesquecible na miña vida».

Como todo lo que comienza tiene un final, también la vida musical de Enrique Martínez, concluyó en 1978. El vocalista de Los Romero aprobara las oposiciones de Magisterio, y el destino le llevó a Maspalomas. Nunca más se subió a un escenario, como profesional de la música, y pese a que tuvo ofertas muy tentadoras de varias orquestas gallegas, «a estabilidade laboral e a continuidade na profesión docente, na que me involucrei e coa que me sentín moi a gusto, decantaron o meu futuro, pois xa non podía compatibilizar as dúas tarefas. Nunca me arrepentín de facer eses dous traballos, pero cada un no seu tempo, e con idades e responsabilidades distintas».