Las insalvables diferencias entre Irmandade y párroco se resuelven con dos procesiones distintas el Jueves Santo
02 abr 2017 . Actualizado a las 13:27 h.La Semana Santa de Boiro dio el pistoletazo de salida anteayer, con la presentación de la revista que elabora la Irmandade do Cristo da Misericordia, y tenía ayer continuidad al cierre de esta edición, con el pregón a cargo del sacerdote Alberto Recarey Gómez y la entrega de medallas a seis nuevos cofrades. Pero lo más novedoso de este año está por llegar, y será el Jueves Santo, día en el que se celebrarán dos procesiones: la de la Virgen de la Soledad y, una vez que finalice esta, la de la Virgen de la Amargura, fijada para las 23.30 horas.
Esta novedad se debe a las insalvables diferencias que se mantienen entre la cofradía y el párroco, Rogelio Freijo, y que impedían un acuerdo para que ambas imágenes desfilaran a la vez, como el año pasado. Estamentos de la Iglesia mediaron adoptando una decisión salomónica: primero sale la procesión del párroco, con la Virgen de la Soledad, a las 20.30, y luego la de la hermandad, con la Virgen de Amargura, una vez que entre la anterior en el tempo. Y esta tendrá un aliciente, y es que los cofrades portarán antorchas.
Imparcialidad del alcalde
Las diferencias entre el titular de la parroquia y la Irmandade do Cristo da Misericordia no son un secreto, como quedó demostrado en la presentación de la revista, acto en el que el alcalde de Boiro, Juan José Dieste, dijo abiertamente que no podía ser imparcial con lo que estaba sucediendo, y alabó a la entidad que dirige el hermano mayor Jesús Martínez Sexto: «O traballo vos avala -apuntó Dieste-. Tanta xente traballando, erre que erre, para facer da Semana Santa de Boiro unha das mellores de Galicia, e que se evidencia tamén en que a irmandade é a quinta destas características a nivel galego en número de asociados».
El regidor habló de lo que significa la Semana Santa en nuestra sociedad: «Forma parte do noso acervo cultural, e a de Boiro é unha demostración de unidade para facer algo grande. É un orgullo que puxerades en marcha este proxecto e o que o esteades mantendo contra vento e marea. O voso traballo debería ser motivo de concordia e non de discordia. Os pobos deben crecer en paz e harmonía, construírse de abaixo para arriba, sen individualismos. Estades a facer unha gran labor e de vós depende o futuro da Semana Santa, que, ademais de tratarse dun acontecemento relixioso arraigado na nosa sociedade, e do que non debemos avergonzarnos, ten o valor engadido de promocionar Boiro».
Dieste hizo mención a las dos procesiones del Jueves Santo: «A da Soledad e a da Amargura, dúas demostracións de sufrimento. Non sei que é peor si estar só ou amargado, ou só e amargado», ironizó antes de desear que «Dios ilumine todas as cabezas, empezando pola do alcalde».