La concesionaria de San Finx pretende mejorar la calidad del agua y el BNG llevará el tema a Europa

Marta Gómez Regenjo
M. Gómez NOIA / LA VOZ

BARBANZA

La representante de los nacionalistas en Bruselas, Ana Miranda, y el diputado Xosé Manuel Rivas visitaron la zona

28 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La representante del BNG en el Parlamento Europeo, Ana Miranda, y el diputado Xosé Manuel Rivas, Mini, visitaron ayer el entorno de la mina de San Finx junto a los portavoces de la formación en Noia y Lousame, Irati García y Amador Turnes, respectivamente, para reiterar su preocupación sobre los resultados de unas analíticas realizadas por Augas de Galicia en la zona y que, según denuncian, muestran unos niveles de determinados metales como cadmio, cobre o zinc que superan ampliamente lo permitido. También la empresa concesionaria de la explotación, Tungsten San Finx, se ha hecho eco de esos análisis para explicar que «ratifican» lo que ellos mismos detectaron en su día y comunicaron a la Xunta. Asimismo, fuentes de la firma apuntaron que, precisamente, uno de sus principales objetivos es tratar y mejorar la calidad de esas aguas.

En este sentido, desde Tungsten señalaron que en las analíticas que realizaron tras adquirir la concesión de la mina lousamiana se detectaron «valores altos» de metales, en una proporción similar a la que aparece en el estudio de Adega utilizado por el BNG, por lo que concluyen: «Sin actividad minera, las aguas ya tienen esos valores». A esto añaden que, si no se les da la autorización necesaria para actuar en la zona, «el problema sigue siendo el mismo».

Por su parte, Ana Miranda explicó que hará llegar a la Comisión Europea los datos del informe de Augas de Galicia para que abra una investigación al respecto después de que esta cuestión, que ya se planteó en Bruselas, quedase aparcada por no contar con información suficiente. En el BNG insisten en que no están en contra de la actividad en la mina, pero exigen que se realice «cunhas mínimas garantías».

La titularidad de la balsa de lodos está por determinar

Un punto en el que empresa y BNG están de acuerdo es en la necesidad de aclarar la titularidad de una balsa de lodos que hay cerca de la mina. La concesionaria reiteró una vez más que esa presa no es suya, mientras que Xosé Manuel Rivas, que ya se interesó por este dato en el Parlamento autonómico, insistirá en esta cuestión: «A pregunta do millón é de quen é esa balsa, porque se rebenta non hai nada que ampare á poboación dunha situación que xa se deu hai anos».

El hierro de la presa está detrás del color rojizo del cauce

Uno de los aspectos más llamativos del entorno de la mina de San Finx es el color rojizo del cauce aguas abajo de la balsa, un fenómeno al que, según explican fuentes de Tungsten, que insisten en que no es la propietaria, hay que buscar en la propia presa. La instalación presenta un importante grado de deterioro y los hierros de la estructura entran en contacto con el agua, provocando que el óxido tiña el líquido.