Los concellos destinan 22 millones más a servicios básicos que hace un lustro

BARBANZA

MATALOBOS

El gasto supuso el año pasado más de una tercera parte de los presupuestos

23 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los servicios públicos básicos son aquellas cargas de obligado cumplimiento para la Administración local y tienen que ver con la seguridad y movilidad ciudadana, el medio ambiente, el bienestar comunitario y el urbanismo. En la práctica, se traduce en el alumbrado público, en la recogida de basura o el estado de las redes viarias y del alcantarillado, entre otras prestaciones, que, habitualmente, el ciudadano no suele valorar hasta que fallan. Sin embargo, desde los concellos del área barbanzana se ha hecho un esfuerzo en los últimos años por avanzar en esta materia, hasta el punto de que hoy destinan 22 millones más que hace un lustro a este fin.

En total, en el 2016 los concellos invirtieron unos 53 millones de euros en servicios básicos, lo que supone más de una tercera parte (concretamente, el 37,6 %) de sus correspondientes presupuestos, aunque con notables diferencias entre unos y otros.

El ayuntamiento carnotano se sitúa a la cabeza del ránking comarcal, ya que, el año pasado, la mitad de los fondos locales fueron a parar a este destino y es el municipio en donde se realiza, con diferencia, un mayor gasto por ciudadano. El alcalde, Ramón Noceda, indica que «a maior parte vai para saneamento e temas medioambientais vinculados tamén ao turismo, como poden ser o coidado dos petróglifos ou do museo aberto».

En términos parecidos se expresa Luis Oujo, regidor sonense, cuyo ayuntamiento pasó de estar a la cola a nivel comarcal a ponerse al día en esta materia, incidiendo en las mejoras en el saneamiento y en la red viaria para conectar a las parroquias: «Estamos facendo un esforzo porque Porto do Son, a diferenza doutros municipios, non ten unha industria forte. A xente vive do medio ambiente e do turismo, polo que é fundamental que a imaxe sexa positiva».

El mejor y el peor salto

Sin embargo, fue Muros el que dio el mayor salto en cuanto a servicios básicos, los cuales pasaron de representar un 19 % del gasto al 27, 7 %. La mandataria, María Xosé Alfonso, indica que en los dos últimos años se hizo hincapié en la adecuación del saneamiento y del alumbrado público.

En la cola de la lista, con la menor inversión en relación al número de habitantes, se encuentra Lousame. El año pasado este gasto representó solo 132 euros por vecino, cuando en el 2011 era de 346. La explicación se debe, en gran parte, a la drástica reducción presupuestaria que se experimentó entre un año y otro, pues en el 2016 se aprobó un proyecto económico de menos de 2 millones de euros, y el otro era de 4,4.

Solo Ribeira, Outes y Porto do Son alcanzaron el gasto medio autonómico por habitante

En términos generales, la correlación entre los fondos que gestionan los ayuntamientos y el número de habitantes que se benefician de ellos ha ido a menos en el último año. De media, el presupuesto por barbanzano supuso unos 651 euros en el 2016. Es más, solo en Porto do Son (en donde fueron 748 euros por vecino), Ribeira (740 euros) y Outes (714 euros) se alcanzó la inversión media que hicieron las Administraciones locales gallegas.

El término outiense merece un capítulo aparte al haber incrementado esa cifra en un 25,6 % en el último año en contra de la tendencia negativa, a la que también plantaron cara los gobiernos boirense y sonense, de acuerdo a los datos remitidos al Ministerio de Hacienda. En este caso, los que peor parados salieron en el último año fueron, una vez más, los vecinos de Lousame (se recortó un 32,9 %), Mazaricos (cayó en un 14,36 %) y Noia (en un 11 %); mientras que en Ribeira y Carnota se mantuvo.