Al Porto do Son le quedan siete vidas

Álvaro Sevilla Gómez
Álvaro Sevilla RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

marcos creo

Con el zaguero Carlos como cancerbero de excepción, el bloque de Lorenzo se agarró a un clavo ardiendo para enviar a la lona a un guerrero Praíña

15 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Casi desahuciado después de una primera vuelta llena de dudas, el Porto do Son demostró que todavía le quedan siete vidas. Contra todo pronóstico, el bloque de Lorenzo envió a la lona a un Praíña que llevaba once encuentros sin conocer la derrota. Se adelantaron los de Teo con un tanto de Lucas Vázquez. Momentos después, el único meta local, Martín, tuvo que dejar el encuentro, obligando al defensa Carlos a enfundarse los guantes. Montero y Nando le dieron la vuelta a un partido que tuvieron que pelear hasta el pitido final.

Abanqueiro-Lesende: 2-4. A Charca, 40 aficionados. A pesar del buen juego, el Abanqueiro no fue capaz de sumar una victoria en casa. Su falta de olfato, y la efectividad lousamiana, condicionaron un encuentro donde los boirenses se quejaron de una mala actuación arbitral. Alejandro y Kevin marcaron los tantos locales. César, Adrián y Alberto hicieron los visitantes.

Bertamiráns B-Taragoña: 0-2. Municipal, 60 personas. Sigue en racha el bloque de Óscar Rial, aunque esta vez necesitó llegar al ecuador del segundo tiempo para que los goles fuesen protagonistas. Alberto Laíño, en el minuto 66, y Alberto Collazo, en el 89, fueron los autores de los dos tantos rianxeiros.

Cabo-Recesende: 1-2. Vista Alegre, 100 incondicionales. El Cabo fue de menos a más, lo que le costó una amarga derrota en casa. Tirando de fútbol directo, el Recesende se adelantó con un tanto de Carlos Franco. Contestaron los verdes con un testarazo de Ciño a pase de Nichelo. En el segundo tiempo, los boirenses se apagaron y Rubén Portos sentenció con el 1-2.

Urdilde-Sálvora: 2-1. Municipal de Urdilde, 60 aficionados. Un error en la recta final del duelo condenó al Sálvora. Se adelantaron los ribeirenses con un tanto de Lobera desde los once metros, pero, en la segunda mitad, el Urdilde aprovechó un despiste atrás para igualar la contienda. Cuando el choque languidecía, un centro desde la esquina cayó en la testa de Mateo, que embocó a la red.

Oleiros-Palmeira: 2-3. A Trinidade. Tres tantos de Palmeira en la primera parte sentenciaron un partido que el Oleiros peleó hasta el último aliento. David Vidal puso picante al duelo con un tanto en el minuto 81, aunque no fue suficiente para rescatar un preciado y necesario punto.

Laxe-Monte Louro: 1-1. Municipal de Laxe, 150 personas. La mala suerte se alineó con un Monte Louro que falló mil y una. Se adelantaron los locales en el minuto 15 y a partir de ahí los muradanos tuvieron que remar a contracorriente. Gabriel, de volea, puso el empate, pero fue poco premio para lo visto sobre el césped.

Malpica-Esteirana: 5-0. Pedra Queimada, 80 aficionados. Las bajas condicionaron al bloque de Lodeiro, que aguantó con orgullo durante el primer tiempo. En el segundo, el Malpica asestó el golpe definitivo con 4 tantos.

Baio-Mazaricos: 3-2. Platas do Reinoso. Un gol en los instante finales envió a la lona al Mazaricos. Chenel y Matías habían adelantando a los visitantes por dos veces, pero el postrero tanto de Pablo Portomoñe fue suficiente para que el Baio sumase la victoria.