El muelle sonense se blinda contra extraños con un doble dispositivo

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

marcos creo

Unas barreras se activarán mediante un despositivo electrónico y se pondrán unos pivotes que solo podrán accionar quienes tengan autorización

21 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Una vieja reivindicación de la cofradía de Porto do Son está ya en fase de materialización. Se trata del cierre de las instalaciones pesqueras para evitar que personas ajenas a la actividad portuaria puedan entrar en ellas. Las obras ya están en marcha y, atendiendo a las solicitudes del pósito que dirige Tomás Fajardo, se ha decidido instalar un doble dispositivo se seguridad.

Habrá unas barreras que se activarán mediante un dispositivo electrónico que tendrá que colocarse en los automóviles. No tendrá coste alguno, aunque todavía no está claro si será necesario abonar una fianza para tenerlo. Además, se pondrán unos pivotes que solo podrán accionar quienes tengan autorización para pasar al recinto.

Acuerdo con el Concello

Uno de los requisitos exigidos por Portos para acometer el cierre de muelles pesqueros es que haya una solicitud por parte del Concello y, además, acuerdo por parte del Ayuntamiento. Ambas condiciones se cumplieron en el caso de Porto do Son.

La cofradía llevaba tiempo demandando la obra ante la sucesión de robos que se estaban produciendo en las instalaciones. De los barcos desaparecía material de gran valor económico y, además, se registraban desperfectos. Por eso, Tomás Fajardo planteó al ejecutivo los problemas y las medidas para atajarlos.

También en Ribeira, según indicó el patrón mayor, José Pérez, quieren que vuelva a activarse el sistema de control de accesos para el tráfico rodado. Las últimas barreras que se instalaron nunca llegaron a funcionar y vehículos que nada tienen que ver con la actividad pesquera transitan a diario por el recinto. Es posible que esto cambie cuando empiece a funcionar la nueva rula.