A la patrona se llega con las tareas hechas

J. romero / J.M. SANDE RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

La Guardia Civil presume de seguridad y evidencia que la época de vacas flacas ha quedado atrás en la compañía

13 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

A los guardia civiles, cada 12 de octubre, el cuerpo les pide fiesta. Y ayer, en buena parte de la comarca, hubo parranda y medallas, pero sobre todo un día de confraternización vecinal. Para llegar a buen puerto la tradición, en Noia, optaron por pasar página. Atrás quedaron los años de austeridad y, sin tirar la casa por la ventana, los festejos se desarrollaron en la propia villa. El escenario del ágape ya no fue la sede de la compañía. Se hizo en el céntrico restaurante Marico (gracias a la ayuda de varias firmas del ayuntamiento), a pocoS metros de la iglesia de San Francisco. Allí, previamente, se ofició una bonita misa. El templo se llenó y no faltaron ni las flores ni el coro. Ni tampoco numerosos agentes que, uniformados o de paisano, estuvieron acompañados por familiares y novias.

Ya lo dijo el máximo responsable de la compañía, el capitán José Manuel Leis, las aguas están volviendo a su cauce: «En la compañía, este año, se han podido cubrir el 100% de las vacantes», además de tener a su disposición y en perfecto estado todos los medios motorizados. La Guardia Civil también se presentó ante su patrona con los deberes hechos. Tareas que, en forma de estadísticas, demuestran que las comarcas de Barbanza y Muros-Noia son seguras. Entre las cifras difundidas hay que destacar el descenso, por cuarto año consecutivo, de las infracciones, que en los últimos doce meses bajaron un 5%.

Buen ambiente

Buena parte de la sociedad barbanzana estuvo a la altura y perfectamente representada. Los actos de Boiro también fueron concurridos, tanto la eucaristía oficiada en Santa Baia como el vino español servido en el centro social. Los vecinos, ya sea en estas localidades, como en Porto do Son, Outes o Muros, supieron arropar a la Guardia Civil en forma de agradecimientos por los servicios prestados, que como aseguró el cura de Noia siempre implican un riesgo para las vidas de los agentes. Tampoco faltaron representantes de policías locales, agrupaciones de Protección Civil, Servizo de Gardacostas o del EVA 10. Los que sí se ausentaron fueron algunos representantes públicos y alcaldes, como los de Rianxo, A Pobra, Carnota y Mazaricos.