Monte Pindo intentará conseguir para el macizo un reconocimiento de la Unesco

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Con ayuda de expertos, la entidad prepara su catalogación como geoparque

29 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El monte Pindo es mucho más que una simple mole de granito, es un museo al aire libre y en demostrar su singularidad lleva embarcada desde hace un lustro la asociación a la que da nombre. El Olimpo Celta atesora importantes restos históricos, culturales y ambientales, pero también geológicos y, precisamente, este aspecto es el que ha llevado a la entidad a marcarse una nueva meta: conseguir para el macizo el reconocimiento como geoparque que concede la Unesco.

El secretario de la asociación Monte Pindo, Mario Maceiras, recalca que la figura de geoparque no es de protección ambiental, como sí lo es la declaración de parque natural, por la que lleva peleando el colectivo desde su fundación. Sin embargo, Maceiras subraya que se trata de un reconocimiento de carácter internacional e indica: «De conseguirse, marcaría un antes e un despois para O Pindo».

El representante de la entidad manifiesta que se convertiría en un espacio geológico de referencia a nivel mundial y que «atraeríamos o interese da comunidade internacional». Pese a la importancia de obtener esta designación, Maceiras subraya: «Non substitúe ás que conceden o Ministerio de Medio Ambiente ou a Xunta». Asimismo, recalca que se trata de un reconocimiento que debe renovarse cada año.

Dos colaboradores

Preparar la tramitación para situar al macizo como candidato a ser geoparque implica un minucioso y largo trabajo. Ayudando a la asociación en este cometido se encuentran la geógrafa Manuela Costa y el geólogo Vidal Romaní.

Aunque falta mucho por hacer, Mario Maceiras explica que se han dado pasos. Por una parte, el Olimpo Celta ya está declarado punto de interés geológico, lo que ha llevado a la realización de diferentes rutas y a que la atención se fije en este aspecto.

A la hora de referirse a la posibilidad de lograr este reconocimiento, la geógrafa Manuela Costa asegura que «é unha carreira de fondo». Afirma que en O Pindo «danse tódolos elementos para conseguir a figura de xeoparque» y destaca «o valor científico» como elemento aglutinador.

Sin embargo, no oculta que solamente el proceso previo para justificar las cualidades del monte para aspirar a esa distinción es muy laborioso. Posicionarse para el reconocimiento de la Unesco implica una catalogación geológica y geomorfológica de cada una de las áreas del macizo: «Hai que caracterizar cada un dos xeositios» e indica que una de las líneas de investigación actualmente abiertas consiste en la catalogación de las geoformas.

Manuela Costa va más allá y considera que la catalogación debería abarcar mucho más que el monte Pindo y extenderse a los municipios limítrofes, con el macizo como elemento aglutinador. En concreto, ella es partidaria de hacer un trabajo a nivel global, implicando también a la población, que llegue hasta Fisterra.

La propuesta de posicionar al Olimpo Celta para su identificación como geoparque fue comentada por miembros de la asociación a la directora xeral de Protección da Natureza, Ana María Díaz, en una reunión celebrada recientemente. En el encuentro, desde luego, se abordó la conocida reclamación del colectivo para que el monte Pindo sea declarado parque natural.

Preguntada por esta cuestión, Díaz manifestó «no somos contrarios a la declaración de parque natural, aunque tiene que haber un aval científico y técnico y una concienciación social, porque implica restricciones».