Los biólogos evaluarán el impacto de los jabalíes en el parque de Corrubedo

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Intentarán determinar la densidad de cerdos salvajes que hay en el área dunar

12 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El trabajo de los biólogos Xosé Pardavila y Adrián Canosa en el parque natural de Corrubedo va más allá de la captura de jabalíes mediante jaulas. La actuación encargada por Medio Ambiente también está encaminada a determinar la densidad de animales que hay en el área dunar, sus protocolos de conducta y el impacto de los mamíferos en el espacio protegido. Será un trabajo concienzudo que se desarrollará hasta el mes de octubre. Los profesionales subrayan la importancia de tener una aproximación sobre el número de ejemplares y precisan, en relación a los comentarios de los vecinos de la zona sobre la existencia de una elevada cifra: «Non sabemos se a percepción social que hai de esta especie é realista ou esaxerada».

Pardavila y Canosa comentan que lo ideal sería conocer cómo se mueven, su comportamiento y su dinámica, lo que requeriría de que algunos ejemplares fueran marcados. Por ahora no hay previsión de que esto vaya a realizarse en el parque natural y señalan que sí se está empezando a hacer en Doñana.

Presión continua

Lo que sí recalcan ambos biólogos es que para controlar la población de jabalíes es preciso efectuar una presión continúa sobre las poblaciones existentes e, incluso, compaginar métodos como los de las jaulas con otros.

Entre las distintas medidas que pueden aplicarse, además de las jaulas que ya se han colocado, los especialistas incluyen la instalación de sistemas de corral, los cultivos disuasorios, la mejora de los cierres en las fincas y la colaboración con las asociaciones de cazadores.

En este caso, su actividad en el parque se mantendrá hasta otoño, cuando los agricultores inicien la recogida de las cosechas. Posteriormente se desconoce qué medidas se aplicarán por parte de Medio Ambiente. Los datos que se obtengan sobre el número de animales existente determinará las pautas.

Para controlar el número de ejemplares que puede haber, los biólogos utilizan un sistema de fototrampeo, consistente en la colocación de unos dispositivos de captación de imágenes: «Proporciona unha información bastante fiable da densidade de animais», comenta Xosé Pardavila.

Los aparatos están colocados en los árboles, a unos quinientos metros de las jaulas. En el conjunto del parque se han colocado un total de siete.

En cuanto al número de jabalíes que el parque natural podría soportar sin que se viesen alteradas otras especies existentes en el mismo, los biólogos comentan que no existe una regla fija, ya que depende de una serie de variables que se modifican en cada lugar. Ambos especialistas también comentan que, en el caso del área dunar de Corrubedo, el hecho de que cada vez haya más superficie de terreno sin cultivar les obliga a desplazarse en busca de comida: «No es lo usual, pero pueden llegar a caminar ochenta kilómetros.