Las exigencias de Costas frenan la regularización de casas en el litoral

Ana Gerpe Varela
A. gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Los afectados ven con inquietud la tardanza en materializar la reforma de la ley aprobada en el 2013 y que ha sido avalada por el Constitucional

30 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Cerca de medio centenar de núcleos de la comarca continúan afectados por la Ley de Costas de 1988 y la inquietud entre los vecinos crece porque, al amparo de la reforma del 2013, en estos dos años solo se han regularizado un puñado de lugares. Decenas de propietarios temen por el futuro de sus fincas e inmuebles, mientras los ayuntamientos se topan con el exigente muro de la Administración estatal para legalizarlos. Una sentencia dictada hace unas semanas por el Constitucional, a raíz de un recurso planteado por el PSOE, avala el proceso, pero lo cierto es que trámites iniciados en Boiro, Muros, A Pobra o Ribeira están sin resolverse porque a Costas siempre le parece insuficiente la documentación.

Los afectados califican la situación de «calvario» y la consideran injusta, dado que, señalan, ni sus casas son fruto del bum inmobiliario ni actuaron al margen de la ley existente en el momento en que las edificaron. Muchas son personas mayores y saben que no dejan en herencia un bien, sino un problema.

En Ribeira y A Pobra todavía no se ha regularizado ninguno de los núcleos afectados. El mandatario pobrense Xosé Lois Piñeiro explica que la respuesta recibida fue que no estaba acreditado: «Revisei a documentación que fixo o goberno anterior e penso que está moi detallada, pero ampliarémola». Esa misma notificación fue la recibida en Boiro para excluir unas zonas y admitir otras, pero desde el Concello apuntan que tramitaron todos los casos con la misma diligencia.

La regidora de Muros, donde algunos de los vecinos afectados hasta tienen el caso en manos de un letrado, abordó recientemente la cuestión con el jefe de Costas, pero lo cierto es que no recibió ninguna respuesta clara.

«Los grandes partidos deben sentarse y resolver este asunto»

El edil del gobierno de Boiro Fernando García Diéguez sabe de la inquietud de muchas familias por el futuro de sus propiedades y se muestra crítico con la falta de soluciones: «Todas las formaciones llevamos tirándonos los trastos a la cabeza desde hace años por este problema. Los grandes partidos deben sentarse de una vez y resolverlo». El concejal añade: «Analicemos cada caso en lugar de andar con recursos en el Constitucional». Asimismo, cuestiona la elaboración de los dictámenes: «El problema de Galicia es que quienes resuelven son técnicos sentados en Madrid. Tienen que venir aquí y comprobar cuál es la realidad de estos núcleos. Esto no es el Mediterráneo».

«Xente que tiña propiedades nos Areeiros marchou polos contratempos»

No hay tregua para Encarna García en su batalla por resolver el problema del deslinde en Os Areeiros: «Temos dereito a pelear polo noso». Ante la falta de información sobre el proceso, va a solicitar una reunión con el alcalde de Ribeira: «Os veciños levan toda a vida loitando sen ver resultados, iso é moi triste». Además, esta mujer afirma que la afección de Costas está motivando un despoblamiento de la zona, algo que le preocupa enormemente: «Xente que tiña propiedades marchou polos contratempos que hai. Os mozos non queren ter problemas». Reconoce que entre los residentes existe una profunda preocupación: «Teñen medo de que isto non se arranxe». El problema de esta localidad fue tratado en una comisión celebrada en Bruselas, pero eso tampoco sirvió para nada. Sin embargo, no se da por vencida.

Incertidumbre

La reforma de la Ley de Costas abría la puerta para la regularización de núcleos tradicionales de la comarca que nada tenían que ver con el bum constructivo que llegó después. Muchos afectados vieron el final del túnel, pero la lenta maquinaria burocrática motiva que la esperanza inicial se haya transformado en incertidumbre y en desasosiego.