Una marea blanca recorrió Boiro diciendo «no» a la droga

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez NOIA / LA VOZ

BARBANZA

Distintas personas portaron la bandera que encabezó la marcha.
Distintas personas portaron la bandera que encabezó la marcha. Creo< / span>

El presidente de la Fundación Contra o Narcotráfico recordó el papel de la operación «Nécora» en la lucha contra esta lacra

28 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El blanco simboliza pureza y quizá esa fue la razón de que se eligiese como marca de la lucha contra las drogas, que ayer se escenificó en Boiro con una marcha que recorrió las calles de la localidad para hacer ver que el problema de la drogadicción no ha desaparecido y que sigue siendo muy necesaria la concienciación de la sociedad para acabar con él.

Esto, a grandes rasgos, es lo que viene a decir el manifiesto de la décima edición de la iniciativa Panos Brancos, que leyeron antes de iniciar el recorrido el alcalde boirense, Juan José Dieste, y el presidente de la Fundación Galega Contra o Narcotráfico, Manuel Antonio Couceiro, organizadores del acto de ayer.

El primero puso el acento en que debe hacerse una apuesta decidida por la sensibilización «para desmontar a falsa crenza que asocia o consumo de drogas e a diversión» y recordó que, aunque «algunhas estatísticas din que o problema está contido, nin moito menos está resolto».

Por su parte, Couceiro incidió en la lucha contra el narcotráfico. En este sentido, recordó la importancia de la operación Nécora, que marcó «un antes e un despois na loita seria contra as mafias». Dio además unas claves fundamentales para acabar con el mercado de la droga.

Sin imposiciones

Habló, por ejemplo, de la necesidad de evitar la reincidencia de los traficantes a gran escala, «que eluden ou ven reducidas as súas penas aproveitando as facilidades dun sistema legal excesivamente garantista». Y habló también de seguir avanzando en el rechazo social: «Temos que divertirnos de forma san e dicir non sen impoñer nada, senón ofrecendo camiños de vida».

Tras la lectura del manifiesto, decenas de personas vestidas de blanco partieron de la plaza de Galicia portando pancartas y banderas con un claro mensaje de rechazo a las drogas. Vecinos que salían al paso de la comitiva aplaudían la iniciativa, un acto reivindicativo convertido en una fiesta por la vida que remató con una suelta de globos.