El naufragio reduce al mínimo la actividad en el mar de Boiro

María Hermida
maría hermida RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

«O que non ten que ir obrigatoriamente á batea por algo xa non vai, vénse a Corrubedo», decía un mejillonero que participó en la búsqueda

19 dic 2014 . Actualizado a las 05:12 h.

El martes por la noche y el miércoles por la mañana, cuando la esperanza se centraba en que los cuerpos de los tres tripulantes del barco bateeiro de Boiro Paquito Nº 2 estuviesen dentro del puente, todavía había margen para quedarse quieto en el faro de Corrubedo. Pero ayer ya casi nadie permanecía parado. «Hai que buscar polas pedras», repetían unos y otros. Y eso hicieron un buen número de profesionales, pero también de voluntarios. Concretamente, desde Boiro se desplazaron varios grupos de bateeiros. Asimismo, acudieron mariscadoras y profesionales de la cofradía, que rastrearon el mar con una lancha. Cuando algunos mejilloneros llegaron a la tienda de campaña instalada por Cruz Roja en el faro para dar avituallamiento, señalaban: «O que non ten que ir obrigatoriamente á batea por algo xa non vai, vénse a Corrubedo».

Lo mismo indicaban algunas productoras a flote, que añadían que la actividad en el mar se vio muy reducida estos días en el municipio boirense. «Non se moven os barcos», decían. Hoy, la situación quizás se normalice algo. El pósito, donde ayer solo trabajó el sector de a flote, hoy incorpora al de a pie.