El restaurante Baiuca desbordó solidaridad. La asociación antidroga Renacer celebró su cena benéfica anual el sábado por la noche, consiguiendo reunir a cerca de doscientos comensales vestidos con sus mejores galas. Aunque el menú era lo de menos, los asistentes pudieron disfrutar de productos de la tierra en la mejor compañía. Barbanzanos de todos los sectores de la sociedad se dieron cita en la parroquia ribeirense de Artes para mostrar su apoyo a la entidad. La teniente de alcalde de Ribeira, Dolores Elorduy; el alcalde de Porto do Son, Luis Oujo; el senador José Luis Torres Colomer y los ediles María del Carmen Vizcaya y Vicente Mariño fueron solo algunos de los representantes del mundo de la política. Tampoco faltaron Magdalena Bringas, de Amas de Casa, o Milagros Rey, de Ambar y Esther Vidal de Amicos. Especial protagonismo cobró Jesús Cartelle, director de la UAD. En el tejido empresarial destacó Ramiro Carregal, presidente de Frinsa, que volvió a dar una lección de generosidad. La firma donó cincuenta lotes de conservas y los regalos que le tocaron en el sorteo los repartió algunos de los asistentes.
Agradecimientos
La presidenta de Renacer, María González, ofreció un discurso en el que dio las gracias a todos los presentes y recordó la importancia de la prevención en estos tiempos. También presentó al equipo de trabajo, formado por María Quintela, Encarna Romero y María Fungueiriño.