Atascos en Muros y tráfico denso en un festivo con miles de desplazamientos

M. Gómez / J. M. Sande NOIA / LA VOZ

BARBANZA

Sande

La llegada del buen tiempo y su coincidencia con la jornada festiva se hizo notar en las carreteras de la comarca

16 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Se hizo de rogar, pero por fin el buen tiempo se instaló de nuevo en la comarca, y lo hizo, nada menos, que el 15 de agosto, una jornada festiva por antonomasia en la que se registraron miles de desplazamientos en la zona. Esto provocó circulación densa en arterias como la autovía de Barbanza y atascos importantes en la villa muradana.

La carretera comarcal AC-550 a su paso por Muros se convirtió ayer en una trampa en la que quedó retenida una larga caravana de vehículos que tuvieron que invertir un buen rato en atravesar la localidad. Fueron varios los factores que confluyeron para convertir la travesía en un atasco desesperante. Por un lado están las altas temperaturas, que hacía tiempo que se esperaban y que provocaron un éxodo hacia las playas; por otro, la coincidencia del mercadillo semanal en un día festivo. Y, para rematar, en la villa se celebraban los festejos en honor a san Roque.

Esto provocó un atasco considerable que llegó a colapsar la localidad. Es habitual que los fines de semana del verano sean conflictivos en lo que respecta a la circulación, pero ayer se dieron una serie de factores que complicaron todavía más la situación, que se repitió por la tarde.

Previsores

Otro punto sensible para el tráfico en jornadas soleadas como la de ayer son los arenales de Carnota. Para evitar las retenciones que se dieron en anteriores días de playa, la Policía Local tomó medidas ante la previsión de una avalancha de vehículos que, efectivamente, se produjo. A primera hora de la tarde, la afluencia a zonas de baño como la de Boca do Río era considerable y los agentes se afanaban en ordenar el tráfico, reforzando su presencia en aquellos puntos en los que se registraron problemas en ocasiones anteriores. Sin embargo, no fue suficiente y hubo que cortar el acceso al arenal que hay en la localidad desde la carretera comarcal porque se colapsó.

Al cierre de esta edición, en la autovía de Barbanza no se habían registrado incidencias, pero sí hubo durante el día un tráfico mucho más denso de lo habitual. El número de vehículos que recorren el vial se multiplica todos los años por estas fechas, pero ni en otros fines de semana de verano, ni tampoco en jornadas laborables, es frecuente toparse con tantos coches circulando por la arteria viaria de Arousa norte como ayer a media mañana.

El tránsito era mucho mayor en dirección a Ribeira, y, aunque fluido, el tráfico era intenso en los dos carriles que rematan en Xarás. En las salidas hacia las playas de la zona, como en la rotonda de A Ribeiriña, incluso se registraron leves retenciones a mediodía, igual que en el centro de A Pobra por la tarde.

Siete heridos

La nota negativa de la jornada la pusieron los dos accidentes que se registraron en distintos viales de la comarca. Ambos tuvieron lugar a primera hora de la tarde y se saldaron con heridos.

La más aparatosa fue una colisión entre un turismo y una furgoneta de pescado en Carnota. Ambos vehículos chocaron en un cruce del vial que va de Paxareiras a Arcos, en el lugar de Cubelo, y como consecuencia tuvieron que recibir asistencia médica una pareja con sus dos hijos, que viajaban en el utilitario, y los dos ocupantes del segundo vehículo. Todos fueron trasladados por el 061 al hospital de Cee.

Por otra parte, un joven sufrió lesiones de consideración al salirse de la vía con el ciclomotor que pilotaba y chocar con un coche aparcado. El accidente se produjo a las 15.36 horas de ayer en la zona de San Lázaro y el joven fue derivado al hospital de Santiago.