Dona Mariquiña recibió el homenaje de los vecinos de A Pobra bajo un intenso aguacero

Marta Gómez Regenjo
Marta Gomez ASADOS

BARBANZA

La lluvia arreció en el momento de la ofrenda en el cementerio.
La lluvia arreció en el momento de la ofrenda en el cementerio. Marta Gomez

Jorge Devoto, nieto de Valle-Inclán, depositó una corona de laurel sobre la tumba de sus padres en el cementerio de San Isidoro

21 may 2014 . Actualizado a las 17:27 h.

María Beatriz Baltasara del Valle-Inclán, conocida en A Pobra como dona Mariquiña, recibió este mediodía el sentido homenaje del pueblo que la vio nacer. La lluvia no fue un impedimento para honrar la memoria de una de las hijas del creador del esperpento colocando sobre la tumba en la que descansa junto a su marido una corona de laurel.

Fue su propio hijo, Jorge Devoto del Valle-Inclán, el encargado de realizar la ofrenda, junto al conselleiro de Cultura y el regidor pobrense y ante la mirada de los vecinos que se acercaron al cementerio de San Isidoro de Posmarcos para sumarse al homenaje.

Antes, en el interior del templo parroquial, autoridades y familiares de Valle recordaron la figura universal del dramaturgo y su influencia en dona Mariquiña, quien siempre expresó su deseo de enterrarse en A Pobra.