En uno de los desfiles más singulares, el de las carracas, se estrenará una imagen porteada por un grupo de niños
05 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Muy pendientes del cielo, los noieses están calentando motores de cara a la Semana Santa. Y es que la villa es uno de los epicentros barbanzanos de estas celebraciones eminentemente religiosas. No en vano, tres cofradías trabajan durante todo el año para diseñar un completo programa de actividades en el que desatacan media docena de procesiones importantes.
El aperitivo se servirá el próximo viernes, con uno de los desfiles más vistosos, el de los Dolores. La comitiva saldrá a las 19.30 horas de San Martiño, acompañada de la banda municipal. El domingo de ramos coincidirán la Borriquita (12.00 horas) y la procesión del Pregón de Semana Santa (17.45 horas). La originalidad de esta cita, promovida por la cofradía de San Francisco, pasa porque una nutrida comitiva de vecinos encarna a distintos personajes bíblicos. Además, por vez primera, el pregón tendrá carácter laico, pues correrá a cargo del catedrático Agustín Dosil.
Para el Jueves Santo está reservado uno de los platos fuertes del programa. Se trata de la procesión de las carracas (20.30). A los sonoros instrumentos que pondrán la nota musical al desfile hay que sumar el estreno de una imagen por parte de la cofradía del Nazareno. Se trata de un cáliz que será porteado por ocho niños de entre 9 y 11 años.
Colofón doble
El viernes será la cofradía de San Francisco la que vuelva a cobrar protagonismo para proponer otra cita importante, el Santo Encontro (O Curro, 10.30 horas). Por su parte, la cofradía de Los Dolores se encargará del Santo Enterro (19.30 horas).
El alcalde de Noia, Rafael García Guerrero, y el cura de San Martiño, José Ortoño, presentaron ayer el programa de actos de la Semana Santa. El párroco situó las celebraciones de la villa entre las más importantes de Galicia, señalando: «Cada ano prepárase e vívese con máis entusiasmo». En este sentido, calificó de impagable el trabajo de cofrades y costaleros «que se esmeran na organización das distintas procesión para goce de todos os veciños».