La reducción media del valor de venta se estima en en torno al 40%
17 dic 2013 . Actualizado a las 13:19 h.El sector constructivo atraviesa por uno de sus peores momentos no solo porque se ha paralizado por completo la edificación, sino porque hay gran cantidad de pisos a la espera de un comprador. Algunos de estos inmuebles sin ocupantes pertenecen a la denominada Sareb, la sociedad popularmente conocida como el banco malo, y otros están en manos de promotores inmobiliarios. Estos últimos, que han realizado importantes rebajas con el propósito de dar salida a las viviendas, aseguran que los precios han tocado fondo.
Diversos profesionales de la comarca indican que, de media, el valor de venta de los pisos ha caído un 40%. También precisan que no han sufrido el mismo descenso las consideradas como segunda residencia, situadas a pie de playa, que las destinadas a primera vivienda.
El administrador de la firma pobrense Keliam, Francisco Crusat, precisó que la sociedad está realizando, hasta final de año, ofertas muy especiales, con descuentos del 20% con respecto al coste real y del 50% sobre el precio de venta: «Queremos dar salida los activos que tenemos sin vender». Todas las firmas quieren desprenderse de los pisos porque estos les generan gastos, ya que deben pagar la comunidad y el IBI.
Francisco Crusat indica que, en el caso de su promoción, la financiación no es un problema para los clientes: «Ya hay una hipoteca existe financiación sobre el precio de compra».
Por su parte, el responsable de la compañía boirense Proboin, asegura: «Hemos pasado por un período de incertidumbre debido a la creación de la Sareb, existía desconcierto al principio porque se desconocía quien era el interlocutor. Ahora la comunicación está clara».
Clientes locales
El representante de Proboin indica que, en el caso de su compañía, se produjo un ajuste de precios y señala que el 85% de las viviendas construidas en la avenida de A Constitución se vendieron a clientes locales. Además, recalca: «Tenemos unas condiciones de financiación excelentes».
Sobre el futuro, se muestra optimista e indica: «El mercado se está moviendo. Yo creo que puede comenzar a repuntar. Lo que es seguro es que los precios no pueden bajar más».
La encargada de la inmobiliaria ribeirense Catering, Nieves Cobas, lo tiene claro: «Para vender hay que bajar los precios y tener una buena edificación bien situada».
Dice que son muy pocos los clientes que no necesitan recurrir al banco para financiar el inmueble que desean. En este sentido, asegura que los bancos ofrecen más facilidades a quienes se decantan por los pisos que ellos mismos venden: «A nosotros nos dan el 80% de lo que se escritura; a sus clientes, el 100%. La inmobiliaria de Cobas efectuó recientemente una campaña en favor del alquiler.