La rehabilitación del pazo de A Mercé tiene la puerta abierta con la nueva Ley de Costas

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

SIMÓN BALVÍS

Los propietarios, la familia Boullón, poseen el visto bueno de Patrimonio

03 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La reforma de la Ley de Costas no solo constituye un paso adelante para la legalización de más de medio centenar de núcleos tradicionales de la comarca, también deja la puerta abierta para la recuperación del patrimonio histórico y, más concretamente, para la materialización de un proyecto que se remonta al año 2005: la rehabilitación del pazo de A Mercé, en A Pobra.

Aunque hace ya tiempo que los propietarios de esta edificación palaciega del siglo XVII cuentan con el visto bueno de Patrimonio para evitar que la construcción acabe desmoronándose, las restricciones de Costas impedían acometer los trabajos. El pazo está en la zona de A Ribeiriña y, pese a encontrarse a los pies de la carretera AC-305, está afectado por la zona de servidumbre de Costas.

Con el cambio en la normativa aprobado por el Gobierno el pasado 19 de febrero, esta zona podrá regularizarse y, por tanto, nada impedirá restaurar el inmueble. Al menos, así lo espera la familia, tal y como señala uno de sus miembros, Juan Boullón: «Existía una contradicción entre las Administraciones. Patrimonio nos decía que teníamos que arreglarlo y Costas, lo contrario. Creo que ahora, con esta modificación, este problema queda resuelto».

Caballerizas y capilla

Juan Boullón explica que existe un convenio con el Concello de A Pobra para la recuperación del pazo, las caballerizas y la capilla. Señala que se acometería la reconstrucción integral del inmueble y que la financiación correría a cargo de la propia familia.

No se habla de plazos, pero los actuales propietarios, que lo adquirieron en el año 1964, parecen interesados en que la tramitación no se demore demasiado: «Lo reconstruiríamos en cuanto tengamos autorización. Tal y como está ahora, en cualquier momento se desmorona».

Boullón alude a la necesidad de fijar una reunión con Patrimonio y con Costas cuando se sepa que hay vía libre. Además, recalca que la intervención tiene que llevarse a cabo bajo la supervisión de Patrimonio.

Desde que se presentó el proyecto para la puesta en valor del pazo han pasado ocho años y habrá que determinar el deterioro sufrido por la edificación en ese tiempo y el incremento de los costes en lo que respecta a la rehabilitación. En el 2005 se cifró en más de 112.000 euros el coste del arreglo de la casa palaciega.

La construcción se encuentra muy deteriorada pero posee un importante valor histórico y constituye todo un símbolo para A Pobra.