«Enganados», así afirmaron sentirse los patrones mayores de Ribeira, José Pérez, y Aguiño, José Oujo, al comprobar que ninguna de las embarcaciones de sus cofradías figura en el listado remitido por la Administración para acogerse al paro por el cierre de los bancos de libre marisqueo.
Muy indignados, tanto Pérez como Oujo afirmaron: «Iso non foi o que se falou en Carril. Sentímonos utilizados». Aseguran que en la reunión mantenida con el presidente de la Federación de Confrarías, Benito González, este afirmó que «se poderían acoller todas as embarcacións da ría de Arousa con permex de marisqueo, con independencia do lugar do libre marisqueo no que traballasen».
Según explicaron, ahora resulta que es obligatorio «ter despachado polo menos unha vez para Os Lombos do Ulla». Ambos dicen que todos los bancos sufren el mismo problema de escasez de bivalvo: «Se os nosos socios poden traballar nos outros bancos de libre marisqueo que están abertos, o resto tamén. Estannos discriminando por completo».