La corporación de Muros aprobó de forma unánime una moción presentada por el grupo socialista contra la posible modificación de la Ley de Demarcación y Planta, que establece el reparto de los partidos judiciales. Estos se reducirían a más de la mitad si llega a aprobarse la reforma propuesta, siguiendo un informe del Consejo General del Poder Judicial del pasado 3 de mayo, una situación que acarrearía la concentración de los juzgados actuales en las poblaciones con mayor población.
La alcaldesa de Muros, Caridad González, explicó las razones que llevaron a su grupo a presentar la moción: «De levarse a cabo esta reforma, suporía a supresión dos xulgados de Muros, Noia e Corcubión, concentrándose todos eles en Ribeira. Iso, ademais, de atentar contra a xustiza de proximidade e contra os dereitos fundamentais dos más desfavorecidos, privará a este concello da cabeceira do actual partido xudicial».
La actual norma data de 1988, fecha en la que se repuso el juzgado de Muros después de una década clausurado. En esta ley, se consideraron los criterios de proximidad geográfica y los poblacionales, circunstancias que se eliminarían, al menos la primera de ellas, con la propuesta actual, ya que los vecinos de Muros y su comarca quedarían a más de sesenta kilómetros de distancia de un juzgado.
Por ello, los ediles de Muros acordaron solicitar al ministerio, a la Xunta, al Consejo del Poder Judicial y al Defensor del Pueblo la paralización de la reforma de la ley. Además se pide al Gobierno gallego que defienda la catalogación de Muros como cabecera del partido judicial y que se retome el proyecto para construir en la villa un edificio para los juzgados.