07 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.
La pintada aparecida en el monte Pindo no es, ni mucho menos, el primer ejemplo de este tipo de actos vandálicos contra el patrimonio barbanzano. De hecho, hay otros casos, si cabe más paradigmáticos, como el del dolmen de Axeitos. En el interior de la construcción apareció en el 2007 un mensaje que recibía al visitante con un «Hola tontos», un saludo de bienvenida que lució en las piedras prehistóricas durante más de un año. Tampoco se libran de las pintadas otras construcciones más recientes, pero no menos importantes. Sucedió en pleno caco histórico de la villa noiesa, en concreto en la fachada de la iglesia de San Martiño.