El cetáceo mide más de once metros y pesa unas quince toneladas
12 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Poco antes de las diez de la noche del martes, tanto la Policía Local como el Grumir de Ribeira recibieron una llamada del 112 alertando del avistamiento de una ballena muerta en las proximidades de la playa de O Corgo, en Corrubedo. El presidente de la Coordinadora para o Estudio de Mamíferos Marinos (Cemma), Alfredo López, señaló que el animal apareció muerto la semana pasada en la ría de Vigo y tras ser remolcado por Salvamento Marítimo, fue soltado en mar abierto.
Los primeros en llegar al lugar fueron los operarios del grupo de intervención de Santa Uxía, que se encontraron al animal con una cuerda atada y encima de unas rocas.
A primera hora de la mañana de ayer se acercó al lugar una unidad del Cemma para comprobar el estado del rorcual y hacer un estudio. Alfredo López comentó que era la misma ballena que había aparecido el viernes muerta en el interior de la ría de Vigo y que una lancha de Salvamento Marítimo dejó a la deriva el sábado a unas veinte millas de la costa.
Atrapada en Liméns
El portavoz de la coordinadora indicó que apareció el viernes en la playa de Liméns, en Cangas, atrapada entre los cabos de varios fondeos existentes al oeste del arenal.
Alfredo López comentó que recomendaron a la embarcación del Ministerio de Fomento que amarrara la pieza a un puerto pues «ao soltala no medio do mar era un risco para a navegación», subrayó. La intención era esperar hasta el lunes para estudiar las características del animal y después proceder a su retirada. Según comentó, es una ballena joven que mide algo más de once metros y pesa alrededor de quince toneladas.
Uno de los principales inconvenientes es que está en un lugar de difícil acceso, por lo que no va a ser nada fácil sacarla de la playa de O Corgo.
Por su parte, fuentes del Concello ribeirense destacaron que están estudiando diversas alternativas para retirar los restos por tierra. El cetáceo fue avistado en la bocana de la ría viguesa el jueves por la tarde y Salvamento intentó, sin éxito, atraparlo. El viento lo acercó de noche a la costa canguesa y un buzo le ató una cuerda para que pudiese ser remolcado por la lancha Salvamar Mirage, que al final lo soltó en alta mar.