La campaña marisquera arrancó en Noia y Ribeira con buenos precios

Jose Manuel Jamardo Castro
J. M. Jamardo RIBEIRA/LA VOZ.

BARBANZA

Los productores ribeirenses temen que la actividad se acorte debido a la escasez de bivalvo

26 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Unos 1.800 mariscadores adscritos a las cofradías de Ribeira y Noia iniciaron ayer las campañas más importantes de la comarca. Había mucho temor entre el colectivo de trabajadores por la cantidad de marisco existente en sus concesiones, y en especial por el precio de las cotizaciones. Tras la primera jornada de actividad, el alivio y la tranquilidad se apoderó de los profesionales porque aunque la situación no está para tirar cohetes, los precios fueron calificados de bastante buenos por parte de los mariscadores. En Noia, el berberecho marcó un récord al llegar a los 20 euros el kilogramo.

En Ribeira, el presidente de la agrupación, Andrés Martínez Rivas, comentó que tienen un sabor amargo porque pese a que las cotizaciones fueron similares, o incluso mejores que las del año pasado, se constató que «temos pouco marisco nas nosas concesións».

La escasez de producto se verificó en Santa Uxía tras comprobar que «houbo xente que non colleu os topes», dijo Andrés Martínez, establecidos en diez kilos de almeja babosa. La misma cantidad para la fina, japónica y la roja, pero que apenas hay en sus concesiones.

En cuanto a los precios, el responsable del colectivo destacó que la más cara llegó a los 40 euros el kilo, similar a año pasado. Pero de este tamaño solo se subastaron «catro ou cinco caixas». Hubo poca mediana y el resto es pequeña. En este sentido, destacó que la que ellos llaman «de parcela», la de menor calibre, se subastó a 12 euros el kilogramo, mientras que el año pasado no superó los 9.

El responsable del colectivo no se muestra muy optimista. Sobre el desarrollo de la cotización, destacó que en los próximos días van a ser cruciales para la campaña y teme que los precios bajen.

La situación no es demasiado buena para las próximas semanas. Martínez reconoció que no tienen mucho marisco en sus concesiones y el que hay es pequeño. Por eso, teme que la actividad extractiva se acorte más de lo previsto, por lo que «teremos que esperar a ver que pasa e aproveitar ao máximo o recurso que temos nas nosas concesións», subrayó.