Arousa Norte aboga ahora por convertir postes y muros en obras de arte

BARBANZA

29 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

De la mano de Arousa Norte, un grupo de artistas adheridos al programa cultural Leñaverde tomaron en primavera las calles más concurridas de las cuatro localidades barbanzanas para convertir las feas tapas de las alcantarillas en obras de arte. Ayer, la mancomunidad dio luz verde a una segunda fase de este plan. En esta ocasión, muros y postes serán los soportes sobre los que se actuará.

Al igual que ocurrió con la primera fase, las intervenciones se sufragarán con cargo a una subvención concedida por la Diputación coruñesa. El objetivo es actuar en dos escenarios distintos: el medio rural y el urbano. Por lo que respecta al primero, los alcaldes barbanzanos ya dieron ayer su visto bueno a la propuesta presentada por la gerencia de Arousa Norte, consistente en decorar con motivos artísticos los postes situados en los caminos de acceso a cuatro puntos de interés turístico: el río Pedras, el dolmen de Axeitos, el Centro de Interpretación Arqueolóxica de Neixón y el hórreo de Araño. Además de la finalidad estética de la iniciativa, el objetivo es contribuir a la señalización de estos recursos.

Decisión pendiente

Pendientes de decidir quedaron los soportes concretos sobre los que actuarán los creadores barbanzanos en el medio urbano. Los regidores se mostraron partidarios de decorar paredes o muros de hormigón de titularidad pública, aunque habrá que esperar a reuniones posteriores para saber cuáles.

En el pleno celebrado ayer, los alcaldes también acordaron invertir otra subvención concedida por la Diputación coruñesa en repetir la experiencia que tuvo por escenario el aeropuerto de Santiago, consistente en recibir a los pasajeros de diferentes vuelos con una representación teatral. La actividad se llevará a cabo los días 26 y 28 del próximo mes.

La tercera ayuda concedida por el ente provincial se invertirá en una iniciativa pionera: el desarrollo de unas jornadas de corresponsabilidad en el hogar durante un fin de semana. Mediante juegos y clases teóricas, se tratará el tema del reparto de tareas. La actividad está dirigida a padres con hijos de entre 8 y 12 años.