Desde que Ramiro Carregal Rey instituyó el Gran Trofeo Faro de Corrubedo, solo una vez estuvo la magnífica reproducción obra del escultor Elías Cochón Rey en las instalaciones del Náutico Deportivo de Ribeira. Ocurrió en el 2001, cuando Manuel Castelo (Vilagarcía) se impuso con su Corsario VI . Ayer, otro vilagarciano consiguió que la pieza se vuelva a lucir otra vez durante un año en la sede de la entidad de Santa Uxía: Ricardo Valdés, quien, a la rueda de su Andarivel , acabó con la hegemonía del Náutico de Portosín, que llevaba cinco triunfos consecutivos gracias a Javier Puertas.
Ricardo Valdés cruzó la línea de meta con escasa ventaja sobre el Opecen Inmobiliaria : 4:36.48 frente a 4:51.16. Esa fue la diferencia entre ambas embarcaciones, las dos primeras de la clasificación de una regata en la que acabó tercero el Ambiotec-Ecopiedra , de Manuel Gil Teijeiro (Náutico Caramiñal).
Los 22 barcos que zarparon del puerto deportivo ribeirense cubrieron las 27 millas del trazado como un tiro, gracias a la falta de mar y al viento que acompañó a los regatistas, viento que inicialmente sopló con una fuerza de 14 nudos, bajó luego hasta los ocho o diez, para subir en el tramo final hasta los 18. Clase regata: 1.º Opecen Inmobiliaria ; 2.º Ambiotec-Ecopiedra (N.?Caramiñal); 3.º Siradella , de César Álvarez. Crucero-regata: 1.º Andarivel ; 2.º Archer-Plataform , de Fernando González (N.?Portosín); 3.º Viajes Atlántico , de José Manuel Pombar (Caramiñal). Crucero: 1.º Somni , de Helmut Bande (Náutico Ribeira); 2.º Tótem , de Felipe Calle (Portosín); 3.º Sabela , de José Antonio Arán Trillo (N. Portosín).