El alcalde de Vilanova anuncia que va a hacer públicas las imágenes grabadas por la cámara de su vivienda y lamenta que, dos meses después de los hechos, la Guardia Civil aún no haya identificado a los autores
07 ene 2023 . Actualizado a las 13:23 h.La subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, informó el miércoles de que la Guardia Civil no ha identificado a nadie en relación con el intento de prenderle fuego a la casa del alcalde de Vilanova -versión que corroboró el coronel jefe de la Comandancia de Pontevedra- ni cree que estos hechos tengan vínculos con la faceta política e institucional de Gonzalo Durán. Estas declaraciones desataron la indignación del regidor popular porque, considera, «atacan a la inteligencia». «Por un lado dijo que no tenía ni idea de quien podía ser el autor y, por otro, que quedaba descartado móvil político. Una de las dos partes no es verdad. (...) Esto me hace pensar que hay interés en que no haya un móvil político. La subdelegada no dijo la verdad en un tema que a mi familia la tiene angustiada».
Desde luego, el dirigente popular no tiene dudas de que este sabotaje está relacionado con su condición de alcalde y afirma saber quién está detrás de estos actos. En los últimos meses ha sufrido varios atentados contra sus bienes, lo que le llevó a instalar cámaras de vigilancia en su casa. Estos dispositivos grabaron el episodio ocurrido el 13 de septiembre, en el que se puede ver a una pareja aproximándose a su vivienda y arrojando unas pastillas de encender barbacoas en su interior. Afortunadamente, el suceso se saldó sin daños personales, pero sí desató las alarmas en la familia de Durán Hermida.
Estas imágenes fueron puestas a disposición de la Guardia Civil, si bien, de momento, no han tenido el efecto deseado en aras de esclarecer la autoría de los hechos. Pasados dos meses, al alcalde ya le tarda demasiado un resultado de esta investigación: «Es imposible decir que no saben nada, por lo menos tiene que saber que son menores de 30 años, que son un hombre y una mujer y que ninguno pesa cien kilos», indicó con sarcasmo esta mañana en rueda de prensa.
Él sí tiene claro quiénes son pero, por razones obvias, no lo hace público. Lo que va a intentar es que todo el mundo haga sus cábalas. «Las imágenes son mías y las voy a hacer públicas. Todos en el pueblo van a saber quienes son».
Durán inscribe estos hechos en la «campaña de odio» que dice estar sufriendo desde 2015, «desde que el PSOE no se hizo con la mancomunidad», y señala a ese grupo político como partícipe en la misma. Se basa en una publicación realizada el 14 de septiembre —el día después del ataque a su vivienda— en un perfil falso de Twitter firmado por un tal Cipriano Villanueva que fue borrado en los últimos días y en el que se podía leer: «Cando se fixo tantas, tantas na política, é normal que lle chegue a súa hora, isto acábase pagando». «Y la noticia le gustó a Jorge María López, exsecretario del PSOE de Vilanova, y a Fátima Abal, [alcaldesa de Cambados]. Sabían lo que había pasado y se estaban regocijando, a Fátima Abal le pareció de puta madre», abunda Durán.
La aludida, por su parte, justificó el «me gusta» realizado ayer a una publicación en el hecho de que se hace referencia al final político de Durán y acusa a este de utilizar el ataque a su vivienda con el fin de desviar la atención sobre la condena por sus declaraciones del «chacha para todo». «Que non intente liarme e facerse a vítima comigo. É unha falta de respecto cara as vítimas de violencia de xénero, é unha burla. É como se un pederasta ponse a dar pena porque un día lle roubaron», apunta la socialista.
Del asunto ha hablado también Jorge María López ahondando en el argumentario de su compañera de filas en Cambados. Opina que la comparecencia de Durán para hablar del sabotaje a su casa es una «cortina de humo» para que no se hable de la sentencia que lo condena por declaraciones machistas y que «él sí está creando un clima de odio contra el PSOE». El socialista se ratifica en su publicación en Twitter. «No me parece que sea tan grave. Claro que me gusta, me encanta, que se le acabe su carrera política, por el daño que le está haciendo a mi persona, a mi familia y al pueblo de Vilanova».
En rueda de prensa, el alcalde también lanzó sus dardos contra la subdelegada del Gobierno: «¿Entendéis cómo se puede sentir uno de indefenso cuando la representante de la seguridad de los ciudadanos de esa provincia, nombrada por el PSOE, dice que no hay motivaciones políticas y yo tengo en la mano desde hace meses pruebas de esas motivaciones políticas y de odio?. (...) A mí me dicen que siguen investigando, y en dos meses podían habernos quemado vivos cuatro veces».
Este viernes continúa coleando el asunto a raíz de unas declaraciones del concejal Javier Tourís por las que lamenta que el PSOE, ni en particular Fátima Abal, hayan condenado el atentado de que fue objeto la casa del alcalde.