Lluvia, trinos y olas del mar en Spotify

Bea Costa
Bea Costa VILANOVA

VILANOVA DE AROUSA

MONICA IRAGO

El músico Santi Oia se atreve también con el ASMR, es decir, a hacer melodías relajantes utilizando sonidos de la naturaleza. El fenómeno triunfa en Internet y ahora llega a la Red con sello arousano

15 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Primero conviene explicar que es el ASMR. Estas siglas responden a la traducción del inglés y significan respuesta sensorial meridiana autónoma. La definen como una experiencia psicológica y física placentera y relajante que se manifiesta con una sensación de hormigueo en el cuero cabelludo y en la parte posterior del cuello y en la columna. Posiblemente muchos lectores la hayan sentido, pero seguro que pocos lo han conseguido mediante la música.

El fenómeno ASMR triunfa en Internet y los músicos profesionales también se están sumando a este carro. Es el caso del gallego Santiago Martínez Castro, de nombre artístico Santi Oia —por aquello de que es natural de Santa María de Oia—, que acaba de lanzar a través de Spotify y otras plataformas digitales Música relajante con Santi Oia.

El título de las canciones es más que sugerente: Entre olas, Noche estrellada en el bosque, Nana de la lluvia, Limpiasueños, Arena y Cosmos, Aurora, Caminando... hasta completar 18 temas. Son composiciones que mezclan música con grabaciones binaurales en la naturaleza y sincronizados con ondas cerebrales Delta, Theta y Alfa. Es un terreno demasiado abstracto para explicarlo con palabras, hay que experimentarlo, pero, en definitiva, de lo que se trata es de captar sonidos de 2,5 hercios que, en circunstancias normales, no son perceptibles para el oído humano, según explica Santi Oia.

Para ello, el músico tuvo que trabajar en su estudio de Vilanova de Arousa y sacar sus equipos de grabación fuera de casa y dirigirse a la playa, al río y al monte. A veces la inspiración le llegó al sentarse frente al teclado; en otras ocasiones escuchando los trinos de los pájaros y la lluvia cayendo sobre un paraguas. El paso siguiente es encajar todas las piezas, jugando con el tempo y las tonalidades, hasta conseguir la melodía deseada. «Lo que le lleva más tiempo es sincronizar las composiciones con las ondas cerebrales. Quería que se percibiese la sensación que producen, aunque a la gente sea lo que menos aprecie», explica.

La música con ASMR actúa como un bálsamo que ayuda a relajarse, a conciliar el sueño, a leer o a estudiar. Santi habla por experiencia propia y por la de su madre, que fue de las primeras personas en escuchar su nueva música y comprobó que conseguía aplacar los zumbidos en los oídos (acúfenos) que le impiden descansar. Para sacarle el máximo rendimiento a la Nana de la lluvia o a Llamando a Morfeo lo mejor es escucharlos con auriculares y sin distracciones y, a partir de ahí, ya solo queda disfrutar.

Detrás hay un gran trabajo de investigación y composición del que Santi Oia está muy satisfecho. Empezó con este proyecto el año pasado, coincidiendo con el confinamiento derivado del covid-19, y quedó absorbido por él. Sin poder salir a tocar en los bares junto a Pablo, con el dúo que forman en Take it Easy, y con las clases de música a medio gas, pensó que era un buen momento para explorar otros campos. Se armó con sus micrófonos y demás bártulos y se fue a Pontearnelas a grabar el silencio de la noche y el despertar del día amenizado por una sinfonía de trinos de pájaros; y se fue las playas de A Illa a capturar el romper de las olas del mar en la arena. Le resulta difícil elegir entre sus criaturas musicales, pero, si hay que escoger, se queda con Fragilidad, con la que plantea una especie de juego con las notas de su piano, según relata.

«El objetivo de esta música es relajar a la gente y si lo consigo, yo me sentiré mejor también», apunta. Opina Santi que en tiempos de angustia y de incertidumbre como los que acarreó la pandemia es bueno buscar la calma, y qué mejor manera de conseguirlo que paseando por la orilla del río o recrearse mirando un cielo estrellado, aunque sea de forma virtual. Algunos se sorprenderían descubriendo la paleta de sensaciones que ofrece un simple clic.

Las plataformas digitales son el futuro a la hora de hacer llegar la música al gran público, especialmente la ASMR. En Take it Easy lo sabe bien porque de las mil copias en cedé que editaron de su disco Máis Fariña solo vendieron 250, y se dan por satisfechos. Los hábitos de consumo han cambiado, y más a raíz de la crisis sanitaria, en la que hubo que aprender a manejarse con el Skype y otras herramientas digitales. Santi también tuvo que hacerlo a marchas forzadas, teletrabajando, a la hora de dar sus clases de música con conexiones, incluso, a Singapur.

Internet no solo se ha convertido en una herramienta de trabajo. Le sirvió, como a tantos otros, para lanzar su música a la Red durante los duros meses de confinamiento, con grabaciones realizadas junto a su hijo en casa. El mundo de la construcción que le esperaba por tradición familiar le queda ya muy lejano. Lo suyo es sacar belleza de una guitarra o un teclado,y ahora, también, de la naturaleza.