Durán dice que en la policía de Vilanova hay una batalla por la sucesión al estilo «Juego de tronos»

B. C. VILANOVA

VILANOVA DE AROUSA

MONICA IRAGO

«Los cuerpos de seguridad no están para pelearse entre ellos, están para trabajar, para ser amables, ayudar a los vecinos y cobrar su sueldo», indicó el regidor

12 mar 2019 . Actualizado a las 21:36 h.

El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, desveló que la próxima marcha por jubilación del jefe de la policía local, Joaquín García, ha abierto una especie de guerra interna por la sucesión. «Todo el mundo quiere ser el jefe y hay piques entre ellos. Yo en juegos de tronos no entro». Durán hizo estas declaraciones en rueda de prensa esta mañana al ser preguntado por la existencia de incidencias en la Festa do Momo, el pasado domingo. Frente a algunas informaciones publicadas, que hablan de la existencia de dos incidentes por la noche -cuando la policía local ya había acabado su turno- el alcalde sostiene que no hubo ningún tipo de altercado y presentó un informe del jefe de la policía para acreditarlo. Se mostró molesto por que transciendan este tipo de informaciones que, asegura, no son ciertas, y que circunscribe a problemas internos en el cuerpo. «Me gustaría que los profesionales no dilucidaran sus venganzas en los medios de comunicación. Los cuerpos de seguridad no están para pelearse entre ellos, están para trabajar. Fue el Momo más pacífico de la historia, lo demás es perjudicar a su pueblo, del que cobran. Los guardias están para ser amables, ayudar a los vecinos y cobrar su sueldo. La política la hacen los políticos. Los sindicatos tienen su función, pero tiene que hacerlo a la cara», añadió el regidor popular.

Durán lamenta que se haga hincapié en la precariedad de medios humanos y materiales que padece la policía local cuando, señala, su situación no difiere mucho de otras policías de la zona. En numerosas ocasiones, las patrullas en Vilanova son unipersonales por falta de agentes y la sede se cae a pedazos. Este último problema se subsanará, asegura Durán, en cuanto deje de llover y se puedan acometer las obras de impermeabilización en la terraza situada en la parte alta de las dependencias policiales. En estos momentos hay cuatro agentes de baja.