Crece la violencia contra mujeres de menos de 24 años y mayores de 65

La Voz VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Martina Miser

Un total de 61 vilagarcianas viven con una orden de protección en activo. Manifiestos, minutos de silencio y una polémica campaña institucional coparon la jornada reivindicativa del 25N a lo largo y ancho de la comarca

26 nov 2022 . Actualizado a las 09:49 h.

El 25 de noviembre, el día para la erradicación de la violencia contra la mujer, no es un día de celebración: debe ser un día de lucha. Porque la realidad a la que nos remite esta fecha marcada en el calendario es la de las 38 mujeres asesinadas en lo que va de año en España. La de las 61 mujeres que, en Vilagarcía de Arousa, necesitan vivir con una orden de protección activa porque están en peligro. Ese dato fue facilitado ayer por el Centro de Información á Muller de Vilagarcía, un órgano dependiente de la Concellería de Igualdade que durante todo el año trabaja con mujeres en situaciones de vulnerabilidad. Según la memoria que recoge la actividad desplegada por el equipo del CIM, este año se han realizado 1.313 intervenciones, vinculadas a las 355 personas que han precisado ayuda de uno u otro tipo. El número de víctimas de violencia machista que han solicitado ayuda en Ravella ha crecido cuatro puntos en relación al año pasado, hasta representar el 35 % de las atenciones del CIM. Malas noticias. Malísimas.

Según señalan desde el centro, en estos momentos hay en la capital arousana 61 mujeres con órdenes de protección activas, como quedó dicho, más otras seis que tienen esa orden paralizada al encontrarse sus agresores en prisión. Además, 21 mujeres tienen el dispositivo de teleasistencia móvil (TAM) que se gestiona a través de un convenio entre la Cruz Roja y la Federación Española de Municipios y Provincias.

Los datos del CIM no son más que la punta del iceberg de la violencia machista. Una violencia que puede alcanzar a cualquier mujer, sean cuales sean sus características, su nivel cultural, su edad... Así lo demuestran los datos del CIM, según los cuales «tense dado un incremento no número de mulleres vítimas en idades temperás, incrementándose as usuarias menores de 24 anos nun punto, pasando do 3,2% o ano pasado ao 4,3% neste ano».

No es una tendencia nueva, dicen desde el CIM: «Obsérvase claramente nos últimos anos, nos que pasamos de dúas mulleres vítimas de violencia entre os 15 e os 24 no 2016, ás 15 deste ano». También crecen los casos de violencia en el colectivo de mujeres de más de 65 años, «pasando do 2,5% no 2021 ao 3,4% neste ano, o que supón 12 mulleres atendidas desta franxa de idade nesa situación».

La mayoría de las mujeres que acuden al CIM para recibir ayuda en casos de violencia, «a gran maioría teñen fillos ou fillas». El 84 % de ellas tiene uno o dos descendientes a cargo; el 13 % tienen tres o más. ¿Y su situación laboral? Según los datos que maneja el departamento municipal, el 40 % tiene empleo. El 42 % no, y de ese porcentaje, la mitad llevan muchos años fuera del mercado laboral. «Sobre o nivel de ingresos é importante subliñar que máis do 62% teñen ingresos anuais tremendamente precarios, que neste último ano foron inferiores a seis mil euros, seguidas polo 27,7 % con ingresos entre os seis mil e os doce mil euros anuais», dice la memoria del CIM.

Ante estos datos, no es de extrañar que el servicio de información del CIM haga frente a un gran número de consultas sobre empleo y ayudas para hacer frente a la falta de ingresos. Y es que en este departamento se intenta prestar una ayuda global a las mujeres, desde apoyo psicológico con terapia individual, de pareja o con los hijos. El asesoramiento sobre los procesos de divorcio y separación centraron el 29 % de las intervenciones abordadas por el departamento jurídico, en el que otro 21,4 % de las atenciones estuvieron vinculadas al derecho de familia, y otras cuestiones, como la modificación de regímenes de visitas o el impago de pensiones motivaron otro 27 %.

El departamento de derecho civil hizo frente a numerosas cuestiones sobre «prórroga de contratos de aluguer, desafiuzamentos…», una problemática que en el 2021 generó solo un 17 % de atenciones pero que en lo que va del 2022 motivó un 53,1 %.

Manifiestos, minutos de silencio y una polémica campaña institucional

El delegado de la Xunta, Luis López, visitó ayer en Vilagarcía un curso de capacitación digital dirigido a mujeres. El encuentro no salió como estaba previsto. Una de las participantes en el curso explicó sus vivencias como víctima de experiencia machista, agradeció el apoyo del CIM, pero lamentó la falta de medios con la que trabajan quienes se enfrentan a este gran problema social. Luego, la concejala Tania García tomó la palabra y pidió la retirada de una campaña de la Xunta que, dijo «pon o foco e a responsabilidade nas vítimas e non nos agresores».

Tras participar en ese acto, García acudió a la celebración institucional que a las doce del mediodía se celebró en Ravella. Dos alumnas del Castro Alobre dieron lectura a un manifiesto en el que señalaron esas formas de violencia machista de baja intensidad que contribuye a normalizar el machismo en ámbitos de lo más dispares. Hubo manifiesto, minutos de silencio, murales, versos, música y todo tipo de manifestaciones culturales encaminadas a hacer reflexionar sobre un problema tan enraizado en nuestra sociedad, que parece imposible solucionarlo. Pero ya lo decían las rapazas que leyeron el manifiesto del CIM en Vilagarcía: «Non se trata de aceptar as cousas que non podemos cambiar; temos que cambiar as cousas que non podemos aceptar».

Por lo demás, la jornada incluyó también manifestaciones, como la que a las ocho y media de la tarde salía de la plaza de Galicia, en Vilagarcía. O como la que discurrió por las calles e Catoira, organizada por el colectivo feminista de esta localidad. A la misma hora, en O Grove una intervención artística daba paso al manifiesto.