Monbus refuerza los buses para los estudiantes ante el colapso del tren entre Vilagarcía y Santiago

Los daños colaterales que están entrañando los bonos gratuitos para el uso del ferrocarril siguen pasando factura a los viajeros que tienen la estación de Vilagarcía de Arousa como referencia. En particular, a los estudiantes que cada semana deben desplazarse entre la capital arousana y Santiago. El ejemplo de este fin de semana es lo suficientemente elocuente. Quienes este viernes pretendan comprar un billete para regresar desde Compostela se encontrarán con una oferta exclusivamente restringida a un servicio: el Alvia que cubre el trayecto entre Madrid y Galicia y zarpa de la estación compostelana a las 22.51 horas. Antes, nada. Claro que el viaje inverso del domingo no está mucho mejor. Ya solo es posible encontrar un asiento en los primeros ferrocarriles de la mañana, a las 7.16, 8.30, 9.53 y 10.03 horas. A partir de las diez, nada de nada. No es extraño que, con estas coordenadas, la compañía de autocares que realiza el mismo recorrido haya tomado medidas paralelas de refuerzo ante el colapso del camino de hierro.

Cada viernes, tres frecuencias de autocar unen Santiago con Vilagarcía, dentro de la línea que a continuación cruza la comarca de O Salnés y se dirige a O Grove: a las 11, 18 y 20.30 horas. Fuentes de Monbus explican que, para la salida de las seis de la tarde, al vehículo que lleva a cabo el servicio se le suma un segundo bus, de unas cuarenta plazas.

Las frecuencias del domingo entre la capital arousana y Compostela se reducen a dos: a las 9.50 y a las 18.20 horas. En este caso, el viaje que se refuerza con otro vehículo es, también, el de la tarde, el de las seis y veinte, aunque únicamente desde la estación de Vilagarcía. Es decir, el usuario que acceda desde O Grove, Cambados o Vilanova viajará en un solo bus, mientras que desde Vilagarcía a Santiago estará disponible un segundo autocar.

Problemas también los jueves

Esto es lo que, de momento, ha arbitrado la empresa concesionaria de la línea que comunica O Salnés y Compostela. No obstante, tal vez estos dos refuerzos deban incrementarse a la vista de que las dificultades para hacerse con un billete de tren ya no se limitan a los viernes y los sábados. Este jueves, apenas hubo problema para encontrar una plaza en los ferrocarriles que viajaban hacia Santiago. La cuestión, sin embargo, cambiaba como de la noche al día si de lo que se trataba era de regresar a Vilagarcía. Los únicos servicios disponibles tomaban la salida en Compostela a las tres y media y a las once menos diez de la noche (de nuevo el Alvia). El resto de frecuencias de la tarde estaban agotadas.

Viajes por menos de 48 céntimos para los usuarios de la Tarxeta de Mobilidade de Galicia

El Gobierno central lanzó los bonos gratuitos para el ferrocarril a finales de agosto, y este reverso imprevisto se hizo patente a las primeras de cambio en forma de colapso. Pese a las medidas de refuerzo que ya entonces había previsto, Monbus, la principal operadora de líneas de autobús de Galicia, reconocía el 9 de septiembre haberse enfrentado «a una avalancha de centenares de personas cuya intención inicial era viajar en tren». En tres horas y media, la empresa se vio obligada a habilitar una veintena de refuerzos con la estación de Santiago como epicentro.

De forma paralela, Monbus aplicó una política propia de bonificación de sus tarifas: un 45 % que se sumó al 50 % que ya había practicado la Xunta para los usuarios de la Tarxeta de Mobilidade de Galicia (TMG). Como resultado de esta agregación, los precios de los viajes en autocar que la empresa opera desde O Salnés se han reducido de forma extraordinaria. Un ejemplo. El billete normal entre Vilagarcía y Santiago cuesta 4,05 euros. Los tomadores de la TMG, una tarjeta de bonos que se obtiene en Abanca y permite una recarga máxima simultánea de 180 euros, viajan hoy por apenas 18 céntimos. El servicio que une la capital arousana y A Coruña es, dentro de este esquema, el más caro, si este término tiene sentido: 48 céntimos. El más barato comunica Vilagarcía y Padrón, y con la TMG cuesta tan solo nueve.

El mal uso del bono de tren castiga a los estudiantes que viajan entre Vilagarcía y Santiago

serxio gonzález

Para evitar que este mecanismo conduzca a la misma deformación que se abate sobre el tren —esto es, que los usuarios de los bonos reserven frecuencias sin medida y colapsen el servicio— la compañía ha eliminado la fórmula de la reserva para aquellos viajeros que utilicen la Tarxeta de Mobilidade de Galicia, la Tarxeta Xente Nova y los propios Bonos Monbus. Quienes deseen disfrutar de estos cuantiosos descuentos, que representan un 95 % frente al precio del billete habitual, deben, por lo tanto, acudir directamente a las taquillas de las estaciones o al propio autobús en las paradas intermedias.

Monbus, que asegura haber recurrido a esta agresiva campaña a fin de «proteger a los viajeros más files y a la plantilla de trabajadores, evitando que un descenso de usuarios derive en situaciones de inestabilidad laboral», recomienda, por último, que se acuda a las estaciones con veinte minutos de antelación.

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