El conjunto vilagarciano recibe al Móstoles con la obligación de ganar
01 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.
No se trata ni siquiera de un todo o nada. Se trata de un algo, de mantener la esperanza de la permanencia una jornada más, o de la nada y la consumación del descenso. En eso se ha convertido el partido que el Arousa disputará esta tarde en A Lomba (17.00) contra el Móstoles. Todo lo que está fuera del césped, todos los ingredientes que cualquier equipo desearía, se han puesto en bandeja. La directiva ha declarado el encuentro de puertas abiertas y muchos clubes de Vilagarcía desplazarán a sus jugadores de la base al campo de A Lomba, que presentará sin ninguna duda la mejor entrada de las últimas décadas, para que apoyen al equipo. Lo resumió, aunque sin decirlo literalmente, el alcalde Alberto Varela en la entrega de la medalla de oro de la ciudad: «Lo de hoy está muy bien, pero acordaos de ir a animar mañana».
Y falta hará animar porque, como advierte Luisito, el Móstoles no es un cualquiera. El Móstoles es un equipo que en la primera vuelta anduvo por donde se le esperaba —es decir, por la zona noble de la clasificación— y que se ha hundido en la segunda vuelta hasta encontrarse en una situación delicada. Para ellos, también es el de hoy un partido a vida o muerte. Una victoria prácticamente sellaría su permanencia, pero una derrota los colocaría en la tabla por detrás del Arousa, que ya ganó en tierras madrileñas, y les haría pasar unas dos últimas jornadas de infarto. La presión llega para todos en una competición terrorífica.
En los locales, la gran duda es cómo se solventará la baja de Cotilla en el lateral izquierdo. Seguramente, el único integrante de la plantilla arlequinada al que se le puede colgar el cartel de titular indiscutible esté el entrenador que esté. Una tarjeta amarilla, probablemente evitable, le obliga a cumplir el ciclo de amonestaciones y le hace un tremendo agujero en el lateral izquierdo a Luisito. Un agujero tan grande que, reconoce el técnico, que ha estado trabajando durante la semana con un par de dibujos tácticos para subsanarlo, pero que todavía tiene dudas de por cuál decidirse.