Un polvorín sin vigilancia en Vilagarcía

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MONICA IRAGO

El ISM de Bamio cuenta con un almacén que guarda artefactos pirotécnicos

06 abr 2022 . Actualizado a las 21:12 h.

La del jueves fue una jornada de sensaciones contrapuestas para los trabajadores del ISM de Bamio, puesto que mientras asistían al pleno de Vilagarcía en el que recibían el apoyo de toda la corporación por la complicada situación que viven desde hace cuatro meses, allí mismo les llegaba la noticia de que el ISM había decidido rescindir el contrato con Mersant Vigilancia sin que se hubiera gestionado la aparición de una empresa puente. Es decir, los trabajadores se quedaban en un limbo. Los que estaban de baja ya habían tenido que recomenzar a realizar las gestiones para cobrar porque la mutua, a quien la empresa no le pagaba, nos les abonó las cantidades correspondientes. Hubo uno de los trabajadores que tuvo la suerte de cobrar 400 euros. La única cantidad desde aquella nómina que ya llegó con retraso el 14 de diciembre porque correspondía al mes de diciembre. Los otros, que son menos, viviendo en un limbo en el que no saben si tienen que acudir o no a su puesto de trabajo puesto que no tiene comunicación de la empresa al respecto. De hecho, ayer uno de ellos, al que le correspondía entrar a las diez de la noche, tenía previsto desplazarse al centro de Bamio a su puesto de trabajo con testigos para comprobar si le impedían o no trabajar y que no se le pudiera acusar de abandonarlo.

Entre tanto, lo cierto es que el ISM de Bamio está sin vigilancia de seguridad y que el asunto no es baladí. Entre otras cosas, y al margen de los destrozos que se puedan realizar en el edificio, no es baladí porque cuenta con un almacén con productos pirotécnicos. Bengalas, botes de humo y pequeños cohetes, que se utilizan para las prácticas de los cursos de marinería, quedarán a partir de ahora sin ninguna protección. Entre otras cosas, porque la Guardia Civil había dado permiso para que el recinto en el que están no estuviera conectado a una central de alarmas porque el ISM contaba con un servicio de vigilancia de 24 horas que ahora no tiene. Ni siquiera nadie avisará a partir de ahora de cualquier posible incendio.

Se había comprometido en el pleno del jueves el alcalde de Alberto Varela a ponerse en contacto con la central del ISM para conocer de primera mano cuáles son sus planes para el centro de formación de Bamio y las noticias que le llegaron no son nada halagüeñas. Habló el regidor con Elena Martínez, la directora del ISM, que le expuso, por un lado, que la intención es encontrar una empresa puente de manera inminente para que el centro cuente con vigilancia, pero que en el próximo pliego de contratación se contará únicamente con personal de conserjería y no con el de seguridad. Es decir, el personal que lleva trabajando en el centro de Bamio veinte años o más es muy probable que se vea en la calle a una edad complicada, además, para reorientar su vida laboral. También se comprometió Martínez, eso sí, a que el ISM pagará de manera inminente los retrasos en las nóminas de Mersant, aunque es verdad que esa promesa ya llegó hace semanas a Bamio y aún no se ha cumplido.