Cómo exprimir un puente pasado por agua en Arousa

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MARTINA MISER

La lluvia limita la oferta, pero no se rinda: la comarca le permite patinar sobre hielo, explorar el fondo del mar o disfrutar del arte

07 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La lluvia ha venido a pasar con nosotros el puente de la Constitución. Para quienes disfrutan estos días de unas pequeñas vacaciones, estas jornadas grises y húmedas son un fastidio. La riqueza natural y paisajística de la comarca, uno de los grandes valores de O Salnés, queda vedada al disfrute general. Hay que buscar alternativas protegidas del mal tiempo. Y aunque algo se ha avanzado en materia de desestacionalización, seguimos arrastrando cierto déficit en lo que a oferta de ocio a cubierto se refiere.

Afortunadamente, en este caso la Navidad juega a nuestro favor: en Valga acaban de inaugurar su belén artesanal, y en Vilagarcía de Arousa, en el recinto de Fexdega, está abierto el Fexturrón, con una pista de hielo como gran reclamo. Si las emociones fuertes no son lo suyo, puede optar por una tarde en los Cines Arousa.

En O Grove, la oferta se multiplica. En cierto modo, la península meca nos invita a mojarnos, pero con agua de mar. El acuario de Punta Moreiras nunca falla. El museo de la salazón, situado a un tiro de piedra, cerró ayer, pero hoy estará listo para recibir visitas. Sin dejar O Grove, bien merece la pena echarle un vistazo al nuevo museo del Pescanova Biomarine Center: le sorprenderá. Y si prefiere el mar en vivo y en directo, los barcos de pasaje con visión submarina siguen haciendo rutas por la ría. El aula de interpretación de A Siradella también está abierta, aunque el mirador —el gran atractivo que lleva a los visitantes hasta lo alto del monte— no ofrezca en días de lluvia su mejor cara.

Estos días también se pueden emplear en visitar las salas de exposiciones, aunque en este caso es conveniente consultar los horarios para asegurarse de que están abiertas. Una de las que no falla es Torrado, en Cambados. En este recinto conviven, a día de hoy, dos muestras muy atractivas: Horizontes Perdidos, de Lino Silva y Tempo-Memoria, como homenaje a Guillermo Charlín.