Chiqui Barros y sus pupilas en el equipo santiagués suman su primer triunfo en la Liga Femenina 2 ganándole en todas las facetas a su pésimo anfitrión
19 nov 2020 . Actualizado a las 23:49 h.El Ulla Oil Rosalía conquistaba en la noche del jueves su primera victoria en la Liga Femenina 2 después de saldar con derrota sus primeros cinco compromisos tras su salto de categoría este verano. Con un 48-55 final en el Pabellón Municipal de Fontecarmoa fruto del trabajo táctico de Chiqui Barros y el buen hacer y la confianza mostrada por sus jóvenes pupilas desde la reanudación del partido que se había suspendido el 31 de octubre por la condensación del parqué de la cancha vilagarciana. Pero también consecuencia de una de las más tristes y pobres actuaciones que se le recuerdan al Cortegada en su historia. Nunca, en ningún momento tras la reanudación del 9-2 en el minuto 5.34 de partido, ni Rubén Domínguez ni una sola de sus jugadoras supieron situarse en un tablero de juego minado desde el principio por las defensas alternas en zona planteadas por el técnico visitante.
La ventaja en el electrónico del Cortegada al término del primer y segundo cuartos, 15-8 y 24-16, era el reflejo de la incapacidad del cuadro local de rendir a un rival sobre el papel netamente inferior. Un equipo de cuatro bajitas en pista con una única referencia en la pintura, la brasileña Leticia Soares. Pero lo que en casi cualquier otro escenario sería sinónimo de ventaja para su oponente, para el equipo de Rubén Domínguez, frente a las zonas en 2-3, 3-2 o en caja con marcaje individual sobre la base vilagarciana, se tradujo en la desnudez de los recursos tácticos manejados por el Cortegada y de las limitaciones de sus interiores, incapaces de fajarse en las sucesivas telas de araña tejidas por las pupilas de Chiqui Barros. Una negra tarde noche desde más allá de la línea de 6,75, cifrada en un único triple transformado en 20 intentos (5 %), no hizo más que tapiar la única salida de emergencia que atisbó en la más negra oscuridad el cuadro arousano cuando ni Sara Gómez ni Cris Loureiro sirvieron siquiera de faro.
Un parcial de 2-16 en tan solo 2 minutos y 17 segundos desplomó el escenario de cartón piedra en el que se había movido el Cortegada hasta entonces, situando al Rosalía por delante en el marcador mediado el tercer cuarto: 28-32. En la última posesión, un 2 más 1 de Soares, que acabaría el partido con un doble-doble de 19 puntos y 11 rebotes, envalentonó al Rosalía, que entró en el acto final convencido de poder ganar. Aguantando los arreones de su anfitrión, el último, a 2.36 para el final con una canasta de Míriam; el último coletazo de un equipo que jugó cual pollo sin cabeza.
FICHA PARTIDO:
A.D. CORTEGADA (48): Patricia Vicente (11), Sara Gómez (7), Cris Loureiro (14), Saric (6) y Sedlakova (8) —quinteto titular—; Zeltia Presas, Lorena Castro, Blanco, Míriam García (2) y María Centeno.
ULLA OIL ROSALÍA (55): Nuria Chorén (4), Castro, Sara Corredoira (11), Clara Riera (12) y Leticia Soares (19) —quinteto titular—; De Matías, Blanca Manivesa (2), González (5), Carro y Liste (2).
PARCIALES (Y MARCADOR) CADA CUARTO: 15-8, 9-8 (24-16 al descanso), 6-19 (30-35) y 18-20 (48-55, resultado final).
ÁRBITROS Y PERSONALES: Manuel Andrés Seijo y Andrés Esteban. Señalaron 18 faltas a la Agrupación Deportiva Cortegada por 12 al Ulla Oil Rosalía. Sin eliminadas.