Los arousanos no renuncian a visitar los cementerios pese a las restricciones del covid

Las restricciones impuestas por el coronavirus no impidieron que los arousanos rindieran este fin de semana su tradicional homenaje a sus seres queridos fallecidos. No hubo las aglomeraciones propias de otros años, pero la afluencia a los camposantos fue constante durante los días previos a la celebración de Difuntos. Con mascarillas, usando los geles hidroalcohólicos y con visitas inferiores a los treinta minutos, muchos fueron los que se acercaron a los cementerios para limpiar tumbas y depositar los tradicionales ramos de flores.

Quizás la principal consecuencia que la pandemia ha tenido sobre la celebración de Difuntos es que la mayoría de la gente se adelantó a su celebración. Si en otros años muchos esperaban al último día para limpiar las tumbas y colocar las correspondientes flores, en esta ocasión hace ya varias jornadas que muchas sepulturas lucen perfectas. Se dejó sentir esto también en los tradicionales mercados de flores, que se celebraron en Vilagarcía y Cambados siguiendo las estrictas medidas de seguridad. Ambos registraron una elevada afluencia de gente y en Cambados, por ejemplo, incluso había que hacer cola en algunos momentos para poder adquirir los ramos a la venta en el paseo de A Calzada, donde se trasladó la cita para poder estar al aire libre.

Medidas especiales

En todos los concellos de la comarca de Arousa se han habilitado una serie de medidas para prevenir la expansión del coronavirus durante la celebración del Día de Difuntos, cuando la tradición manda visitar los cementerios para acordarse de los seres queridos fallecidos. Las nuevas restricciones se explican en unos carteles colocados a la entrada de los cementerios, donde también hay botes con gel hidroalcohólico. En muchos de estos recintos, además, se han habilitado unas puertas para acceder al interior y otras para salir, con el fin de que la gente no tenga que cruzarse. El uso de mascarilla es, por supuesto, obligatorio y solo los convivientes pueden acceder en grupo, que en ningún caso será de más de cuatro personas. Es obligatorio respetar la distancia de un metro y medio de separación, por lo que queda prohibido formar corrillos para charlar con los vecinos. Además, también se limita la estancia en estos espacios a un máximo de medio hora, con el fin de que haya tiempo para que todos los interesados puedan acceder al camposanto sin tener que sufrir aglomeraciones. En municipios como Vilagarcía han optado también por ampliar el horario de apertura de estos recintos, que mañana domingo no cerrarán hasta las diez de la noche.

Hasta ahora, la situación ha transcurrido con normalidad en todos los camposantos de Arousa. Y aunque la afluencia de gente fue elevada en muchos de ellos, no se vieron grandes aglomeraciones. Pero será sin duda durante la jornada de hoy cuando se registre un mayor número de visitas a estos recintos, por lo que los Concellos estarán pendientes de que no se infrinjan las normas de seguridad impuestas. Con todas las restricciones puestas en marcha, los municipios esperan conseguir que todos aquellos que así lo deseen puedan acercarse a los cementerios para recordar a sus seres queridos fallecidos. Pero también quieren que este trámite se realice sin que se registren aglomeraciones que puedan suponer una vía de contagio del coronavirus, es decir, con la máxima seguridad posible.

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