Un día de Reyes negro para los delfines de la ría de Arousa

A. parada RIBEIRA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

CEMMA

El Cemma investiga un nuevo varamiento masivo de hasta seis cetáceos en Boiro, Vilagarcía y Catoira

07 ene 2020 . Actualizado a las 07:42 h.

Mientras el domingo en las calles se vivían escenas de sonrisas en la cara de los niños que disfrutaban de las cabalgatas de los Reyes Magos, en la ría de Arousa la comitiva era muy distinta. Un nuevo episodio de varamientos masivos arrastró a seis delfines mulares a distintas ubicaciones, algunas tan poco frecuentes como las marismas de las Torres do Oeste en Catoira y el río Ulla. Dos de ellos, una madre y su cría, vararon en la zona boirense de Neixón. Fue una jornada negra que ayer tuvo continuidad.

El caso de los mamíferos de Neixón, tuvo un triste desenlace para el ejemplar adulto, que acabó falleciendo. Los profesionales de la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos do Medio Mariño (Cemma) lograron reflotar a la cría -se encontraba en un lodazal que cubría a las personas por la cintura-, pero ayer había desaparecido, sembrando la duda de si habría podido reagruparse con la manada o habría acabado corriendo el mismo destino que su madre. Pudieron comprobar que ya era capaz de alimentarse por si sola, pero eso no es garantía total de su supervivencia.

Los profesionales de la organización han pasado dos jornadas de duro trabajo. Además de los delfines de Boiro, el domingo consiguieron que los integrantes de Protección Civil de Catoira, el cuerpo de bomberos de O Salnés y personal del Concello -regidor incluido- reflotasen otro ejemplar varado en el Ulla dándoles instrucciones telefónicas. En la mañana de ayer pudieron subir a este cetáceo, de 100 kilos, a su embarcación para llevarlo hasta la boca del puerto vilagarciano, donde se había visto por última vez a otros dos. Y en Pontecesures seguía atrapado en una zona inaccesible por su profundidad otro delfín.

Sin explicación

Lo cierto es que este nuevo caso de varamientos guarda muchas similitudes con los acontecidos durante el pasado verano en la comarca. No obstante, desde el Cemma señalaron que hay diferencias notables, principalmente, que ninguno de los ejemplares presentaba síntomas de desnutrición.

De la misma forma, los expertos de esta entidad tampoco identificaron ningún indicio aparente de que estuviesen enfermos, por lo que de momento las causas del suceso son toda una incógnita.

«Nesta época son comúns as varadas, pero adoita a aparecer un animal morto. O que pasou estes días non é para nada normal», explicó Alfredo López, biólogo del Cemma, que también descartó que se tratase de un problema causado por el estado del mar. Además, al igual que durante el estío, los expertos han recogido muestras que serán analizadas en laboratorio para obtener más datos.