El madrugador rescate del Nergha

Rosa Estévez
rosa estévez A ILLA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MARTINA MISER

Alrededor de las cinco de la mañana de ayer, el velero que varó el viernes frente a A Illa pudo llegar hasta el puerto de O Xufre tras ser reflotado por una empresa

29 dic 2019 . Actualizado a las 19:11 h.

Un velero vigués puso en marcha, el viernes por la noche, un amplio despliegue de medios de salvamento en la ría de Arousa. El barco, bautizado como Nergha, estaba en singladura por estas aguas cuando, por desconocimiento de la zona o por despiste, fue a tocar con los bajos bautizados por los marineros isleños como Os Petóns, a escasa distancia de tierra. A las ocho menos veinte de la tarde, Salvamento Marítimo era alertado de lo ocurrido. «Informan de un barco varado con una vía de agua en la ría de Arousa», explican desde este servicio.

Según el relato oficial de lo ocurrido, un bateeiro que estaba en las inmediaciones se puso de inmediato rumbo al punto del siniestro para comprobar lo ocurrido. Al mismo tiempo, se activaron los servicios del helicóptero Pesca 1 y de la Salvamar Sargadelos. Habían pasado diez minutos cuando la tripulación del Marpra, que así se llama el barco mejillonero, informaba de que, efectivamente, «había un velero llamado Nergha escorado y la tripulación estaba intentando achicar una vía de agua».

A aquellas alturas de la noche la marea estaba bajando. El rescate del barco se antojaba complicado mientras el mar no volviese a llenarse, pero en aquellos momentos la prioridad eran los tripulantes del barco. El Sebastián de Ocampo se aproximaba a la zona y enviaba una embarcación auxiliar que fue, finalmente, quien rescató a los tres ocupantes del velero. Más allá del susto, ninguno de los tres precisó asistencia sanitaria.

Tras su viaje frustrado hasta A Illa, el Pesca 1 emprendió el camino de vuelta a su base, aunque la Sargadelos permaneció en la zona para tomar parte en el rescate del velero. Según explican desde Salvamento Marítimo, pronto «se comprueba que sufre una escora importante». Antes de hacer ninguna otra cosa, se decidió «fondear el ancla pese a la vía de agua». Según el relato de hechos realizado por este servicio, tras adoptar esa medida de precaución el propietario del Nergha decidió contratar a una empresa local «que sacó al velero usando para ello flotadores y dos planeadoras».

En plena madrugada

Ocurría esto alrededor de las cuatro de la mañana. Para entonces, la marea ya llevaba un tiempo subiendo, lo que a priori debería facilitar la operación. El barco puso rumbo al cercano muelle de O Xufre, hasta donde llegó en medio de una expectación inusitada dada la hora de la noche que era.

En cualquier caso, fue necesaria la ayuda de los Bombeiros do Salnés, con base en el parque de Vilagarcía, para achicar el agua del velero. «La bomba de achique que tenía no daba abasto y tuvimos que actuar con dos más», dicen desde el parque vilagarciano. Una vez completada esa última fase de la operación, el barco fue trasladado al puerto deportivo de Vilanova de Arousa a primera hora de la mañana para analizar el alcance de los daños sufridos en esta peripecia y evaluar los costes de su reparación.

El accidente se produjo muy cerca de tierra, al golpear el casco unos

bajos rocosos