San Dólar, patrón del fútbol

José Ramón Alonso de la Torre
J.R. Alonso de la torre REDACCIÓN / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

VITOR MEJUTO

Lo sucedido con el torneo Arousa Fútbol 7 desvela la verdad del balompié

02 ene 2019 . Actualizado a las 12:09 h.

No imaginaban aquellos marinos ingleses, que, según la leyenda, disputaron el 26 de junio de 1873 el primer partido de fútbol de España en un descampado situado en las traseras de la capilla de San Roque de Vilagarcía... No imaginaban que, 145 años después, aquel deporte jugado con una pelota de trapo se convertiría en un negocio marcado más por el dinero que por los valores del juego limpio y la competición.

Resulta curioso que el deporte en general tenga santo patrón, San Sebastián, pero el fútbol en particular no tenga a quién encomendarse. Alguien ha propuesto sin éxito a San Luigi Scrosoppi, un hombre que amaba a los niños y tenía espíritu alegre. Pero yo creo que el patrón del fútbol debería ser San Roque, no solo porque el primer partido se jugara, legendariamente, en las traseras de su capilla vilagarciana, sino porque el segundo encuentro entre equipos de fútbol en España tuvo lugar en Riotinto, también en 1873, pero 50 días después que en Vilagarcía: el 16 de agosto, ¡con motivo de las fiestas de San Roque de ese pueblo onubense!

Aunque si analizamos lo que ha ocurrido recientemente en Vilagarcía con el torneo AF7, creo que mejor sería nombrar patrón del fútbol a San Dólar o a San Euro, como prefieran. ¡Qué lejos quedan aquellos tiempos en que el fútbol era, de verdad, un deporte que movía masas y promovía los valores del esfuerzo, la superación y la amistad desde niños! Con ese propósito nació el torneo AF7 de Vilagarcía. Pero ya ven, 65.000 euros, un poco de politiqueo y algún desencuentro menor han bastado para que lo de los valores del deporte dé paso a los valores de la pasta.

Fútbol y pasta... La última vez que pedí a un amigo que me prestara dinero fue para ver un Arousa-Pontevedra en A Lomba. Creo recordar que se jugaban el liderato, la expectación era tan grande que se habían instalado gradas supletorias en el estadio, pero era final de mes, la entrada costaba 800 pesetas y yo no tenía un duro, así que le pedí mil pesetas a un amigo y pude ver al Arousa ganar 2-1 en un partido memorable.

El Arousa se fundó por puro amor al deporte cuando «fútbol era fútbol», máxima de Boskov tan simple como descriptiva de aquellos tiempos (1944) en que Manolo Gallego, entrañable veterinario vilagarciano, alquiló la leira de A Lomba a doña Desamparados Barrio por 6.000 pesetas anuales. Como el terreno estaba sembrado de maíz, hubo que segarlo y explanarlo para poder jugar al fútbol. Mientras se acababan la siega y la explanación, el Arousa jugó todos sus partidos fuera de casa: aquella temporada solo tenía positivos.

En este 2018 que acaba mañana, se cumplen 70 años del ascenso del Arousa a Segunda División A y en 2019 se cumplirán 70 años del descenso. El caso es que el club estuvo una temporada en la División de Plata y eso marca para siempre. Aquel año de 1958, presidía el Arousa don Luis Cordal Carús, el popular doctor Carús, que tiene plaza propia en Vilagarcía, fue el primer dentista que hubo en la ciudad, fundó el Club de Mar y subió al Arousa a Segunda.

En aquellos tiempos del fútbol heroico, cualquier sitio era bueno para jugar. Manolo Gallego alquiló un maizal en 1944 para hacer A Lomba, pero ya tenía experiencias semejantes porque en 1931 había fundado el Salnés Fútbol Club de Lantaño y jugaban en una carballeira.

Muchos vilagarcianos recuerdan que aquí, durante años, la afición al fútbol de verdad, la que defiende valores, educa a los niños y promueve el fair-play, se sustanciaba en O Cavadelo, en pleno centro de Vilagarcía, donde se disputaban partidos a todas horas. ¿Qué hubiera pasado si desde Pontevedra, Sanxenxo o Ribadumia hubieran tentado a los promotores de los torneos de O Cavadelo con diez millones de pesetas para que se los llevaran a otro lugar? Pues que hubieran dicho que no: aquello era una iniciativa en Vilagarcía para los vilagarcianos y detrás había una ilusión y un propósito sincero de estímulos educativos y deportivos.

Otro caso semejante es el del baloncesto. Durante años, Vilagarcía tuvo equipo sénior puntero en la liga EBA, pero en lugar de empeñarse económicamente para llegar a la élite, los amantes vilagarcianos del baloncesto fundaron un club para enseñar deporte desde la base. Así nació el CLB (Cortegada Liceo BBC) en 2013, sin pretensiones de negocio, pero con ilusiones.

Comparando lo que ha sucedido con el torneo Arousa Fútbol 7, que nació en Vilagarcía para promover los valores del fútbol entre los jóvenes y los niños vilagarcianos y se va porque les ofrecen 65.000 euros en Sanxenxo... Comparando con los tiempos en que el fútbol era cosa de héroes o con la filosofía del CLB de baloncesto, llegamos a la conclusión de que lo grave en este asunto no es si el PP promovió políticamente el cambio a Sanxenxo o lo promueve ahora a Ribadumia. Lo importante y lo grave es que el torneo, que nació lleno de valores y basado en un discurso de fomento del deporte y sus virtudes entre la juventud vilagarciana, se marche ahora por dinero y por política. A veces, fútbol es negocio y mucho cuento.

En 2018, se cumplieron 70

años del ascenso del Arousa a Segunda División

El patrón del fútbol debería ser

San Roque por haber santificado sus inicios