La Xunta estudia alternativas para sustituir el plástico en el trabajo del mar

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MARTINA MISER

Mexillón de Galicia edita una guía de buenas prácticas en el sector mejillonero

26 feb 2021 . Actualizado a las 19:35 h.

Antes de desaparecer, un palillo de batea que se cae accidentalmente al mar permanecerá más de cien años siendo zarandeado por las olas o enterrado entre las arenas de una playa. Convertido en un residuo, ese palillo es solo una ínfima parte de los ocho millones de toneladas de plásticos que cada año acaban en los océanos del planeta. Un problema medioambiental que es «cousa de todos», pero al que el sector del mar gallego está dispuesto a plantar cara. El primer paso lo ha dado el Consello do Mexillón de Galicia, que en colaboración con el Instituto Español de Oceanografía y con la Asociación Mar de Fábula, ha elaborado una «guía de boas prácticas» para reducir la basura marítima que genera el laboreo del mejillón.

La guía se presentó ayer en Vilagarcía, en un acto al que acudieron bateeiros de todas las rías gallegas y, también, algunos patrones mayores de Arousa. Porque todos los que viven del mar saben que cuidar del medio ambiente es fundamental para que el «principal subministrador de alimentos deste plantexa», tal y como lo definió Francisco Alcalde, presidente de Mexillón de Galicia, siga siéndolo.

La conselleira do Mar, Rosa Quintana, quiso ayer agradecer al sector que haya puesto este «gran de area» para solucionar un problema de unas dimensiones enormes. «Se queremos ter futuro, temos que ser os primeiros en cambiar a nosa forma de traballo» y en buscar fórmulas más respetuosas con el medio que nos ha convertido en una potencia pesquera y acuícola.

En esa lucha, había dicho minutos antes el presidente del Consello Regulado do Mexillón, debe implicarse también la Administración. Según Rosa Quintana, en ello está el gobierno gallego. «Xa mantiven unha primeira reunión de traballo coa conselleira de Medio Ambiente», dijo. Encuentros en los que se abordó la necesidad de poner en marcha líneas de investigación que permitan dar con productos sustitutivos del plástico que permitan al sector ser más respetuoso con la naturaleza sin elevar de forma insostenible sus costes de producción. Hay varias líneas de trabajo abiertas, pero aún habrá que esperar para que lleguen a buen puerto.

Pero está claro que, si la lucha contra el plástico y la basura marina es crucial, también resulta urgente ganarle la batalla a los vertidos. «Esa é unha prioridade para o goberno galego», aseguró Quintana, quien indicó que se han hecho inversiones millonarias para conseguir ese objetivo. Y estarían dando sus frutos, según afirmó. Así, «temos conseguido o cambio de catalogación de 43 zonas de produción que melloraron e que son máis seguras para traballar». Puso como ejemplo el fondo de la ría de Pontevedra, que pasó de estar catalogado como zona C a zona B. «E seguimos a traballar nesto, porque é unha prioridade».

Trece consejos para minimizar el impacto del laboreo del mejillón

La guía de buenas prácticas presentada por el Consello do Mexillón no solo hace un repaso detallado por los efectos que el plástico y otros contaminantes tienen sobre la vida en el mar, sino que aporta una serie de consejos para los productores de mejillón. El primero, «non botes nunca ningún lixo ao mar. Dispón dun sistema adecuado de recollida». A partir de ahí, es preciso «trasladar os residuos da batea a terra para a súa reciclaxe». En segundo lugar, se recomienda tener la batea ordenada y despejada, evitando almacenar materiales innecesarios que puedan acabar en el mar. Es necesario, también, realizar con máxima precaución todo tipo de labores, como el izado de cuerdas, para evitar el desprendimiento de palillos y cuerdas.

Un buen mantenimiento es también imprescindible para minimizar la contaminación, sustituyendo aquellas piezas que estén deterioradas -desde bidones a cuerdas- y prestando atención al estado de la maquinaria de los barcos auxiliares. Aunque aún falta desarrollar productos alternativos que permitan desechar el plástico de las bateas, se recomienda que siempre que sea posible se utilicen materiales naturales, y se fomente la reducción, reutilización y reciclaje. También es aconsejable utilizar productos inocuos en los tratamientos de la batea.

La guía incluye otros consejos que, a estas alturas, siguen siendo útiles: «se fumas, nunca tires ao mar as cabichas» es uno de ellos. El otro, el que habla de la necesidad de garantizar «a retención de augas de senteina evitando o seu verquido».