La mejor guía para un parto feliz

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MONICA IRAGO

María González relató el procedimiento que se sigue en el Hospital do Salnés. «La leche materna es el mejor alimento para el bebé, no hay sucedáneo que se le acerque», asegura

11 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

No hay una fórmula mágica, pero existe un camino para conseguir que el parto sea una experiencia agradable, «un momentazo», según resumió María González. La matrona del Hospital do Salnés fue la protagonista de las charlas saludables que organiza La Voz de Galicia y que, en esta oportunidad, tenían como protagonistas al parto y a la lactancia materna en un acto que se celebró en el auditorio de Vilagarcía.

María González se centró en los partos más habituales, en los que no existen complicaciones y en los que la mujer debe sentirse protagonista. Ella y su bebé son lo más importante, insistió. El empoderamiento de la mujer, como definió la matrona. A partir de ahí, surge la corresponsabilidad con los profesionales, que son los que conocen a la perfección qué camino se debe seguir y qué decisiones se deben tomar. En el Hospital do Salnés si el parto transcurre con normalidad es la únicamente matrona quien acompaña a la parturienta y a quien esta escoja para estar con ella.

En el Hospital do Salnés son las mujeres quienes deciden. Se trata de conseguir que el centro hospitalario se convierta, en la medida de lo posible, en su casa, según apuntó González González. Pueden escoger en qué postura quieren parir - «somos verdaderas maestras de la contorsión», bromeó María-, si utilizar o no la bañera, quién quieren que las acompañe, pueden hasta sacar fotos del momento.

Desmontando mitos

María González también utilizó su intervención para desmontar mitos. «No somos -en el Hospital do Salnés- unas hippies que nos negamos a poner la epidural. Tenemos a disposición de las madres todas las posibilidades, las farmacológicas y las no farmacológicas», explicó, y para ello existe el plan de parto. Y también subrayó María que ya no se grita. Ni siquiera tiene por qué doler. «Como matrona y como madre de dos hijos, desmiento que el parto siempre duela», subrayó.

Y aprovechó la charla para presumir del lugar donde trabaja y destacar la categoría de sus compañeros en un Hospital do Salnés que tiene el rango de Amigo de los niños, que no es nada fácil de conseguir.

Las intervenciones del público dejaron cuestiones muy interesantes y un resumen que lo puede definir todo a la perfección. «Las personas no somos fórmulas», es decir que cada parto es un mundo y que lo que se trata es de intentar aprovechar las herramientas personales de las que cada mujer dispone para conseguir que el momento inolvidable que debe ser dar a luz una nueva vida se convierta además en lo más agradable posible.

«La leche materna es el mejor alimento para el bebé, no hay sucedáneo que se le acerque»

Tras el parto tocaba hablar del siguiente paso, y María González fue igual de tajante y de convincente. «La leche materna es el mejor alimento para el bebé, no hay sucedáneo que se le acerque», sentenció. Y no lo dice porque sí. Lo dice apoyada en los numerosos estudios que existen al respecto, «y cuantos más se hagan más se reforzará esta idea», concluyó.

Más allá de los beneficios físicos que para el bebé supone tomar el pecho -inumerables a la hora de prevenir enfermedades- aparece también la importancia del apego, la agradable sensación que tiene el niño y que le permite un desarrollo óptimo en el plano emocional e incluso social, porque los estudios demuestran que los niños que han tomado el pecho son más tranquilos. Unos beneficios que se trasladan también a las madres, que se vuelven más tolerantes en situación de estrés y que, a la larga, tienen menos posibilidades de desarrollar cánceres de mama o de ovarios.

Y como no hay mejor ejemplo que los testimonios en primera persona, Gopzález mostró dos vídeos clarificadores. Lucía, madre de gemelos, contó su experiencia y animó a las madres a que lo intenten. «Os primeiros quince días son complicados», advirtió, pero aporta una sensación de tranquilidad y sosiego que es impagable, dijo. María, que pese a que lo intentó no pudo disfrutar de lactancia materna en plenitud y la tuvo que combinar con la leche artificial, explicó que la sensación de tener a sus hijas en el pecho es algo que la acompañará siempre.

Bien lo sabe María González, La protagonista de las charlas saludables dio el pecho a su segundo hijo hasta que cumplió los cuatro años. No hay por qué estirarlo tanto, pero hasta los dos años es muy beneficioso, explicó.