Ravella intenta atajar los desmanes de los coches en García de Caamaño

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

OSCAR VíFER

El Concello ha colocado vallas para conseguir que se respete la zona peatonal

21 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Era una escena nada tranquilizante que se repetía día tras día. Coches maniobrando en la zona peatonal entre García de Caamaño y Vista Alegre mientras los niños que salían o entraban del colegio caminaban o corrían entre ellos, ajenos al latente peligro que tanto trajín creaba. La zona es peatonal, pero a determinadas horas aquello se convertía en una autopista, para desesperación de los vecinos del lugar, que denunciaron en varias ocasiones -y con soporte fotográfico- el caso omiso que muchos conductores hacían a la prohibición de circular con sus vehículos por la zona.

Acostumbrar a los conductores

El Concello de Vilagarcía se ha decidido a poner fin a estos desmanes y para ello ha colocado unos vallas que desanimen, en la medida de lo posible, a los conductores a obviar la señal que prohíbe la circulación de vehículos a motor por el lugar. «Se toma esta medida para tratar de acostumbrar a los conductores a que respeten la zona peatonal, porque desde el inicio del curso están aparcando y, lo que es más grave por el riesgo que supone para los peatones -especialmente para los propios niños que acuden al cole-, circulando de forma masiva, maniobrando y no atendiendo al sentido circulatorio establecido en la zona», apuntan fuentes municipales.

La idea es que esta medida preventiva cale en los conductores y que no haga falta tomar medidas más importantes para evitar que se reproduzcan las peligrosas maniobras que allí sucedían. «Se dejará durante unos días así, pero posteriormente se enviará a la Policía a controlar la situación y, llegado el caso, denunciar con la consiguiente imposición de sanción», explican desde el Concello.

El concejal de Tráfico de Vilagarcía, Juan Antonio Pérez Callón, asegura que las sanciones son el último recurso, pero que no tendrán dudas de hacerlas efectivas si algún conductor vuelve a hacer caso omiso de las señales porque, recuerda, que es una zona en la que prioridad es la seguridad de los viandantes.

Lo cierto es que, por el momento, parece que las vallas están siendo efectivas ya que en los últimos días tanto los vehículos aparcados como las maniobras incorrectas y peligrosas han disminuido de manera exponencial. De hecho, según apuntan desde el colegio Sagrada Familia que está en las inmediaciones de la zona en cuestión, son ya muchos los padres de alumnos que utilizan los aparcamientos disuasorios a la hora de dejar o recoger a sus hijos en el colegio vilagarciano.