Entregan un centenar de firmas en Ravella para pedir el cierre de la travesía Pablo Picasso

Los vecinos de la travesía Pablo Picasso de Vilagarcía remitieron ayer al Concello un centenar de firmas con las que reclaman la peatonalización de este vial. Sostienen que este es un tramo aparentemente tranquilo y de uso peatonal mayoritariamente, pero que en los últimos tiempos se está haciendo «un uso temerario como atajo hacia la rotonda del puerto», reza el escrito que han entregado en Ravella. No les sirven las últimas medidas implantadas por el Concello en la zona, para limitar a 30 la velocidad máxima, pues consideran que están pensadas para los vehículos, no para los peatones que se juegan la vida a diario cuando transitan por esta calle, argumentan.

Tras mucho protestar, los residentes han conseguido que el gobierno local ponga en marcha una serie de medidas, pero no están de acuerdo con las mismas. «Consideramos que son incoherentes para una travesía, pues no protegen al peatón sino que lo exponen mucho más», continúan argumentando. Se ha pintado un paso de cebras en el suelo, «que no es una protección física para los peatones» como lo serían las aceras o los bolardos. Tampoco están de acuerdo con que se prohíba el aparcamiento, pues consideran que así se «facilita el uso temerario de la travesía. A menos coches, más velocidad de los que pasan». Y sostienen que es excesiva la velocidad máxima de 30 kilómetros por hora. «Esta velocidad es un peligro, sobre todo en la primera parte de este tramo, de tres metros de ancho y con viviendas que dan directamente a la travesía», se quejan. Otra de las propuestas municipales pasa por instalar bandas reductoras, pero los vecinos consideran que eso sería un castigo para ellos, por el ruido que hacen. En este caso, sí estarían dispuestos a aceptar unos badenes de hormigón.

Pero a lo que de verdad aspiran los residentes en este espacio es a que se cierre y peatonalice, con paso permitido para los residentes en Pablo Picasso y en la urbanización de O Castriño. Explican que el tráfico que va hacia la rotonda del puerto puede hacerlo por la carretera general «sin comprometer la vida de tantas personas». Aluden a la ley sobre circulación de vehículos a motor, «que no recoge las travesías como atajos y sí contempla el que se puedan cerrar por motivos de seguridad». Con este fin han realizado una recogida de firmas, que ayer entregaron en las oficinas municipales. En el escrito reclaman la peatonalización del vial y recuerdan que no son ellos los únicos usuarios de este espacio, pues son muchos los colegios e institutos que lo utilizan para acceder con sus alumnos al parque de O Castriño. De no peatonalizarlo, reclaman al Concello que instale badenes de hormigón, que limite la velocidad a 15 kilómetros por hora, señales de zona escolar, que se coloque acercas o bolardos y poder seguir aparcando en esta travesía.

Los residentes consideran que la única solución es la de peatonalizar este acceso

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