Desalojan un edificio y llevan a un bebé al hospital tras un incendio en un bar de Vilagarcía

Los vecinos de un edificio de la calle San Roque, en Vilagarcía, se despertaron ayer, a las cuatro de la mañana, con un buen susto en el cuerpo. A esa hora, una densa humareda se filtraba en los primeros pisos del inmueble, procedente de un incendio que se había declarado en una especie de almacén al aire libre que hay en la parte posterior de la construcción. En dicho espacio, separado de la calle por una simple valla, guardaban los responsables de un establecimiento de hostelería, el bar Peñón, sillas de plástico y todo tipo de materiales.

Por alguna razón, estos utensilios comenzaron a arder, alarmando a los vecinos y a los efectivos de la Policía Local que acudieron al lugar de los hechos. Decidieron, de inmediato, desalojar a los habitantes de los primeros pisos. Entre ellos, un bebé de cuatro meses que, por precaución y seguridad, fue trasladado al hospital.

Hasta el lugar del incendio se desplazaron, alertados por el 112, los Bombeiros do Salnés y los efectivos del servicio municipal de Emerxencias. Sofocar el fuego no les supuso demasiado trabajo, explicaron. Tras ventilar las viviendas, permitieron a los vecinos regresar a sus hogares en cuanto la situación volvió a la normalidad.

A media mañana, en el bar Peñón reinaba la más absoluta normalidad. Eso sí, en la parte trasera del edificio las huellas del incendio se dejaban ver escalando por la fachada del inmueble.

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