Vilaxoán propone una pequeña casa museo en memoria de Pepe Rubianes

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MONICA IRAGO

La vivienda en la que nació el cómico todavía se levanta en la calle Vázquez Leis

18 ago 2023 . Actualizado a las 20:00 h.

La dedicatoria de una calle de La Barceloneta, que desde el pasado domingo lleva su nombre, ha despertado en Vilaxoán el interés por la figura de Pepe Rubianes, dormido desde que, hace nueve años, Vilagarcía le dispensó un cálido homenaje meses después de su fallecimiento. Más allá del mayor o menor acierto de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, a la hora de calificar al almirante Cervera, desplazado del callejero por el actor galaicocatalán, lo cierto es que las propuestas en torno a su memoria se suceden en la capital arousana, donde nuestro hombre nació en 1947. Una de ellas partió ayer de la asociación de vecinos. ¿Por qué no estudiar la creación de una pequeña casa museo en la vivienda en la que Pepe Rubianes vino a este mundo?

La casa en cuestión todavía existe. Desde 1947 ha llovido mucho, y el edificio, de planta baja y primero, ha sido reformado. Hoy, señalan los miembros de la asociación de vecinos Vilaxoán, pertenece a familiares del cómico y se encuentra en buen estado. Tanto, que está alquilada y habitada. «Cando menos cremos que sería unha boa idea colocar algún tipo de sinalización que lembre que Pepe Rubianes naceu aquí», indica el presidente del colectivo, Xoán Mariño.

La edificación se ubica en la calle Vázquez Leis, a un paso de la plaza Rafael Pazos y de la sede de la Cofradía de Pescadores. Es una estructura de dimensiones modestas, con fachada pintada de azul y carpintería blanca. La viuda del actor, Lucila Aguilera, recuerda perfectamente haber viajado a Vilaxoán y conocido la casa y el pueblo. «Pepe hablaba mucho de su tío Lelo, de A Lagoa, uno de esos personajes surrealistas que tenéis en Galicia», rememoraba Lucila el domingo, horas después del acto en el que se descubrió la placa con el nombre de Rubianes, en la misma calle en la que tuvo su última residencia: «Pepe, aunque llegó a Barcelona con tres años, era muy gallego, en su casa se hablaba gallego y tenía mucha influencia de Galicia».

«Con todas as súas dificultades, esa pequena casa museo podería converterse nun factor importante para o turismo cultural non só para Vilaxoán, senón tamén para toda Vilagarcía», indica Xoán Mariño, quien no obstante asegura ser perfectamente consciente de que la vivienda tiene propietarios. «Trátase, neste momento, de propoñer ideas, outra cousa é como se poidan levar a cabo, e que a familia estea ou non disposta a ceder a casa dalgunha maneira, pero polo menos sería importante que a xente soubese onde está e o que representa», puntualiza el portavoz del colectivo vecinal.

Pepe Rubianes nació en esta casa azul el 2 de septiembre de 1947. Con apenas tres años, su familia se trasladó a Barcelona, instalándose en el barrio de la Barceloneta. Sus padres, de carácter abierto, regentaron una pensión. A comienzos de los años 80, el actor realizó un viaje a Cuba del que regresó con una idea muy clara en la mente: enfrentarse en solitario al escenario y al público. Nació así el espectáculo Pay-Pay, en 1983, un montaje pionero del que acabarían bebiendo gente como Buenafuente, Carlos Latre o Manel Fuentes. Rubianes falleció el 1 de marzo del 2009.

La asociación de vecinos cree que, como mínimo, su casa natal debería señalizarse

«En principio, o máis indicado sería darlle o seu nome ao centro do Preguntoiro»

Esta semana, o goberno socialista de Vilagarcía confirmou a súa intención de facer cumprir o acordo plenario que, no 2009, acordou dedicarlle un espazo público da cidade a Pepe Rubianes. Daquela falouse do centro sociocultural do Preguntoiro. Pero o equipo do alcalde, Alberto Varela, está disposto a estudar outras posibilidades, coma o propio auditorio municipal, ou ben unha rúa ou unha praza. En calquera caso, Ravella consultará a escolla coa asociación de veciños de Vilaxoán, o lugar no que o cómico naceu.

Neste sentido, e independentemente da idea desa posible casa museo, o colectivo veciñal aposta, cando menos nun principio, por manter o centro do Preguntoiro. «Teremos que darlle unha volta, claro, pero o máis indicado sería darlle o seu nome ao centro sociocultural», sostén Xoán Mariño. Unhas instalacións que, na súa opinión, deben funcionar como un dos eixos da vida social da vila. Como primeiro paso, unha reforma que trasladará a cafetería á parte frontal e recuperará os camerinos e unha aula.