La jabalina lanzada al Olimpo

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

MARTINA MISER

Campeón gallego juvenil los dos últimos años, el pupilo de Javier López piensa en el próximo título nacional, y sueña con el podio en los Juegos

28 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El pasado sábado Jónatas Pereira Horro (Brasil, 11/IV/2001) hizo lo que se le presupone a un competidor nato, aguantar el dolor, y dar su mejor versión posible cuando el calendario obliga a presentar batalla. Con una tendinitis rotuliana en sus dos rodillas desde hace un mes, y un dolor que se ceba con mayor esmero en su articulación izquierda, la de la pierna de apoyo, el vilanovés cumplió como pudo en Castellón en el Campeonato de España de Invierno de Lanzamientos Largos Menores. Una suerte de Master reservado para las ocho mejores marcas nacionales, solo que al inicio de la temporada; mirando al Campeonato de España Juvenil de Verano, la gran cita nacional del año, en julio. Para subirse a lo más alto de este último podio en jabalina lleva meses trabajando Jónatas, segunda mejor marca de salida en Castellón, donde acabó quinto. Alcanzar los 67 metros que darán derecho a viajar al Mundial Sub-18 de Hungría en agosto es su otro reto, con los 59,82 metros que lució brevemente este mes como mejor lanzamiento de España de su categoría y los 63 metros a los que ha llegado a mandar la jabalina en algún entrenamiento animándolo a creer. A él, y a su entrenador.

Forjador de Gustavo Dacal, diez veces campeón de España absoluto y récord nacional durante casi tres lutros hasta hace un par de semanas, Javier López Viñas lleva puliendo a Jónatas Pereira desde que este tenía 9 ó 10 años, trabajando con él en el nucleo de entrenamientos de la Real Federación Española de Atletismo que dirige en Pontevedra. Hoy, con el objetivo de ver al arousano colgarse la que sería la cuadragésima medalla nacional de un atleta preparado por López.

Vilagarcía, Cuntis, Pontevedra

Sería este, y tiene mucha pinta de que lo acabará siendo, un nuevo choque de hitos en la carambola de la vida que arrancaba con el nacimiento de Jónatan en la familia Pereira Horro a la edad de 6 años, procedente de Brasil.

Al poco tiempo, «vendo un mundial de atletismo pola televisión dixen, ¡eu podo facer iso!», recordaba ayer el vilanovés, estudiante de 4º. de la ESO en el Colegio Filipenses de Vilagarcía. Y así entró en la escuela de atletismo de la Fundación de Deportes de la capital arousana que dirigían los hoy responsables de la Agrupación Atlética Mazí. Con su hermana mayor Adriana dedicada desde hacía tiempo al atletismo, los padres de Jónatas, Antonio y Rosa, buscaron el club más cercano en el que sus hijos pudiesen proseguir en el deporte del tartán tras el cierre de la escuela.

Desembarcaron en el Atletismo Cuntis, que entrenaba en Caldas. «Empecei correndo, e non me gustaba nada. Pero os xoves o noso adestrador, Pardal, que tiña unha xabalina, poñíanos a lanzar», rememora Jónatas. Eso bastó para mantener su atención hasta el siguiente y decisivo nuevo choque de bolas de la carambola. «A miña irmá -también era lanzadora- comezou adestrar con outros atletas do Cuntis en Pontevedra co grupo de traballo de Javier López, e acopleime. Nunca me fixara como era lanzar de verdade a xabalina, e mentres ía correndo pola pista quedei mirando. Javi díxome se quería lanzar. Fixouse en min, e díxome que non o facía tan mal. Facíame moita ilusión que alguén me ensinase a lanzar. Desde entón só adestro con el», dice, «para chegar a ser o mellor» en la disciplina, hasta el punto de dejar la práctica del baloncesto, que compaginó hasta hace un par de años, primero en el Cebé, después en el Xuven. Tocaba elegir camino para intentar llegar a despuntar. Y la elección dio sus frutos de inmediato.

Primer estirón

Tras un par de bronces con 13 y 15 años, Jónatas dio el año pasado su primer gran estirón. Con su primer título gallego, revalidado este año, y su debut en el Campeonato de España Juvenil de Verano, del que extrajo una de las grandes lecciones de su mentor: «Fun ao Nacional oitavo ou décimo do ránking. Facíame moita ilusión. Sabía que non ía gañar, fun gozar da experiencia. Os nervios pasáronme factura, e quedei último. Javier deume unha charla que me motivou moito. Díxome ‘Ás veces unha derrota faiche pensar máis cá unha vitoria’». Introvertido y muy maduro, como lo definen en su casa, su técnico señala a su capacidad de aprendizaje y actitud como pluses del arousano.

Con el campeón olímpico alemán Thomas Röhler como referente, y las enseñanzas de un técnico del nivel de Javier López, Jónatas afirma sin atisbo de petulancia que «tecnicamente son o mellor lanzador de xabalina que hai agora mesmo na categoría en España», para acto seguido apuntar que «teño que mellorar moito a forza respecto aos meus rivais». A mes y medio de los 17 años, con 184 centímetros de inacabada estatura, el arousano quiere «gañar algunha medalla nun mundial ou nos Xogos Olímpicos».