Una carrera contra el tiempo para combatir la epidemia del siglo XXI

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Mónica Irago

Uno de cada seis gallegos sufrirán ictus a lo largo de su vida; el doctor Tato Vázquez da las claves para plantarle cara

25 oct 2017 . Actualizado a las 10:38 h.

Parece mentira, pero en el momento en el que Barack Obama se convertía en presidente de los Estados Unidos, cualquier gallego que no viviese en Santiago lo tenía crudo para, primero, que un ictus no lo matase, segundo, que, aun sobreviviendo, las secuelas le permitiesen hacer vida normal sin acabar en una cama o en una silla de ruedas, probablemente también con grandes problemas para hablar. Corría el año 2009, y esta patología, consistente en una interrupción del riego sanguíneo al cerebro, solo podía tratarse en un plazo de tres horas, y únicamente en la unidad especializada de Compostela. Afortunadamente, un equipo de profesionales, con el catedrático de Neurología del Clínico compostelano, el profesor Castillo, el jefe de la unidad, el doctor Miguel Blanco, y el coordinador de Urgencias de O Salnés, Manuel José Vázquez Lima, se pusieron manos a la obra para desarrollar un plan específico que acabase con lo que era, no ya un sinsentido, sino una verdadera sangría.

El resultado es un sistema de telemedicina que permite que, en todos los hospitales gallegos, sus profesionales de Urgencias dispongan de la colaboración de un neurólogo vascular al otro lado de la conexión de Internet para ofrecer al paciente un primer tratamiento. Se trata de un fármaco que rompe el coágulo y no puede utilizarse en todos los casos (no en los ictus hemorrágicos ni tampoco en personas que sufren determinadas dolencias) pero sí posee un elevadísimo grado de eficacia. El tiempo máximo para administrarlo es de cuatro horas y media, por ello el lema del programa es o tempo é cerebro. El código se puede activar acudiendo al centro de salud o al hospital más cercano, pero la forma más rápida es telefonear al 061.

Este es, a grandes rasgos, el esquema que Tato Vázquez presentó ayer en la primera de las charlas saludables que La Voz programa en Vilagarcía. La sesión se desarrolló en el auditorio, introducida por la directora asistencial de la EOXI, Sonia Fernández-Arruty y moderada por el periodista Eugenio Giráldez, y sirvió algunos datos para la reflexión. Uno de cada seis gallegos sufrirán un ictus a lo largo de su vida. En estos momentos, uno de cada diez pacientes se recupera totalmente, ocho podrán hacerlo parcialmente y uno no tendrá esa oportunidad. En Galicia, 35.756 personas sufren daño cerebral. La inmensa mayoría de los casos, el 78 %, se deben al ictus.

El plan, en el que el equipo del Hospital do Salnés fue pionero, garantiza que en 40 minutos desde su llegada al hospital el paciente contará con un TAC, unas pruebas clínicas, un diagnóstico y la administración del fármaco trombolítico, si es posible. El resto lo tenemos que poner nosotros. Los datos se disparan a partir de los 65 años, mucho ojo con la hipertensión, sin descuidar cuestiones como el consumo de alcohol y tabaco y el colesterol, y bienvenidos sean los hábitos saludables de vida. Si se nos duerme un brazo, balbuceamos al tratar de hablar o los labios se nos caen, un telefonazo inmediato al 061. La charla concluyó con unos consejos de Conchín Abellás, supervisora de Enfermería, una toma de tensión y una divertida encuesta a través de Internet. O tempo é cerebro.