A la sombra del parque de Dona Concha se celebró ayer una gran comida campestre con sardiñada incluida
20 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Hay fiestas que hacen conexión. Que tocan algún tipo de resorte oculto en el pueblo que las acoge. Que logran reunir a familias y a grandes grupos de amigos de todas las edades. As Revenidas de Vilaxoán es una de esas celebraciones. Hace ya unos años, un grupo de rapaces de la localidad decidió recuperar una fiesta antigua, enraizada en la esencia mariñeira del pueblo. La aderezaron con un festival de música que se sale de lo común. Y redondearon la jugada con todo tipo de espectáculos al aire libre, bajo las sombras del parque de Dona Concha. Y el resultado de aquella mezcla inusual es el delicioso cóctel de tradición y modernidad, de pasado y futuro, que ayer se sirvió en Vilaxoán para propios y extraños.
Manteles sobre las mesas dispuestas por la organización, manteles por los suelos, toallas disfrazadas de manteles. El parque era, a las dos de la tarde, un gran comedor al aire libre que recordaba a las viejas romerías. Comida casera por aquí, tacos, burritos y hamburguesas de los food-tracks que se alineaban a un lado del recinto. Y las sardinas asadas, deliciosas, saladas, en su punto. O, si lo preferían así, las propuestas más novedosas cocinadas por chefs con estrella que también quisieron sumarse a la celebración.
Alrededor de semejantes banquetes, familias enteras. Desde el abuelo que miraba con cierta curiosidad a los jóvenes festivaleros que también habitaban el recinto, hasta los niños pequeños que disfrutaban de sus primeras correrías entre la multitud.
Y, en medio de todo ese bullicio, la música que se abría paso en cualquier rincón. Como la de Galifunk Brass Band, que arrancó los aplausos del público con su impecable repertorio. Actuaban a la hora de la sobremesa, mientras en las mesas se animaban las conversaciones y, en algunas sillas reclinadas -o sobre el suelo los menos previsores- se soltaban algunas cabezaditas.
La fiesta continuaba ayer, con circo solidario, con la feria Revenidas. Y, aunque sin tanto ajetreo, prosigue hoy. Así que, si aún no han estado, aprovechen la ocasión. Es una cita de esas que no se debe perder uno.