Ravella plantea un triturado de piedra y hormigón para los párkings disuasorios

En el modelo que el equipo del socialista Alberto Varela se propone aplicar en Vilagarcía guarda una especial importancia la consecución de espacios próximos al centro de la ciudad para el estacionamiento de vehículos. Lo que ha dado en denominarse aparcamiento disuasorio, que facilite un cambio de costumbres en la sobreutilización del automóvil y permita avanzar en la política de peatonalizaciones. Dentro de esta estrategia, el gobierno municipal sondea la posibilidad de rodear el núcleo urbano de un millar y medio de plazas gratuitas. La consecución del uso de tres fincas, cedidas por sus propietarios junto al colegio de A Escardia, en la calle inmediata, Vila Janer, y en el barrio de O Piñeiriño, obedecen a este principio. Sin embargo, con la llegada de las lluvias salta a la luz un problema importante: sin una intervención sobre su superficie, las precipitaciones convierten estos terrenos en auténticos barrizales, de modo que de lo que disuaden al conductor es, precisamente, de dejar en ellos el coche.

Soluciones, en cualquier caso, existen, y Ravella está a punto de echar mano de una de ellas. El concejal de Obras, Lino Mouriño, lo explica: «Como consecuencia da rehabilitación do punto limpo que está en marcha, temos á nosa disposición un volume importante de triturados de pedra, escombro e formigón. É un material limpo que pode ser empregado para crear unha base, tanto na reparación de pistas e estradas coma nesta serie de aparcamentos, impedindo que se formen pozas e lama».

En busca de un convenio

Se trata, en realidad, de una fórmula muy socorrida. Es, sin ir más lejos, lo que está haciendo la empresa que levanta la estructura del hipermercado que Alcampo promueve en el antiguo solar de Megasa: reutilizar los escombros obtenidos de la demolición de las viejas naves de la compañía metalográfica en el allanamiento y preparación de la finca para albergar su nueva actividad. Claro que el Concello no puede intervenir sin más. Mouriño advierte que es imprescindible que los propietarios de las fincas que se utilizan como estacionamiento autoricen la aplicación de este tipo de material y todo se defina en el correspondiente convenio.

De momento, a través de esta vía Vilagarcía ha ganado unas 150 plazas en el entorno del colegio de A Escardia, así como 400 en la amplia finca que se abre a los pies del colegio de O Piñeiriño. Este segundo terreno ofrece unas condiciones orográficas muy complejas, puesto que al problema de la lluvia y la acumulación de agua en su superficie se suma su situación, muy por debajo del nivel de la calzada, lo que exige a los conductores salvar una rampa demasiado empinada.

Por lo que respecta al triturado al que se refiere el edil socialista, su obtención es consecuencia directa de los trabajos que en estos momentos se desarrollan en Pinar do Rei. Ravella espera que la Consellería de Medio Ambiente tenga en cuenta el acondicionamiento del punto limpio a la hora de cerrar el expediente de sanción abierto ante la forma en la que, durante largos años, se fueron acumulando al aire libre cierto tipo de residuos, en especial los electrónicos.

Aun sin concluir, la inversión de 57.596 euros que se está ejecutando en Pinar do Rei, a cargo del Plan Concellos de la Diputación, ha modificado radicalmente la apariencia del punto limpio. Un ejemplo. Las montañas de algas que verano tras verano se fueron depositando en las instalaciones han desaparecido, y con ellas el nauseabundo olor que desprendían.

Silos cerrados

Los electrodomésticos apilados al sol y a la lluvia se han esfumado. En el lugar que ocupaban se levantarán una serie de silos a cubierto, cuya creación ha subvencionado, finalmente, la Xunta. Mouriño calcula que el remozado punto limpio estará concluido a finales del mes que viene. Las algas, garantiza, ya no volverán.

La renovación del punto limpio proporciona al Concello un producto idóneo

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